El responsable de la sectorial de arroz en la Unió de Llauradors, Enric Bellido, asegura que «los arroceros no se exponen a ninguna reducción de las ayudas agroambientales» que reciben de fondos europeos por mantener los campos de arroz inundados entre octubre y enero, tal como se advertía en la denuncia ante la Fiscalía por los bajos niveles del agua en l'Albufera.

Bellido admite que «las inundaciones hivernales siempre han sido problemáticas en l'Albufera» aunque la situación se ha agravado este año «por el decreto de sequía que los labradores también están padeciendo». Y añade que el Júcar, el principal aportador de agua limpia a l'Albufera «sufre demasiadas extracciones. Actualmente hay muchas restricciones y no hay dotación de caudales ecológicos, por lo que la Junta de Desagüe no puede mantener el nivel del agua deseable». Y concluye que «el problema real es que no hay agua y eso provoca que la zona norte de l'Albufera se quede sin ella, pero el labrador no es responsable de ningún incumplimiento». l. b. valencia