Una fatal casualidad hizo ayer que la muerte de Rita Barberá se produzca el mismo día en el que el Boletín Oficial del Estado (BOE) publica la modificación de la ley 9/ 2010 sobre Designación de senadores o senadoras de la Comunitat Valenciana que habría permitido su revocación como representante autonómica en el Senado. La reforma auspiciada por Podemos, e impulsada a raíz de la investigación en la que se vio inmersa Barberá, que ocupaba el cargo por designación de las Corts a propuesta del PP, salió adelante en octubre con los votos de PSPV, Compromís, Podemos y Ciudadanos y el rechazo de los populares, que anticiparon un posible recurso.

La reforma que hoy entrará en vigor suprime el trámite de la comparecencia previa del candidato «debido a su intrascendencia efectiva» y añade entre las posibles causas de cese la «revocación» de la designación acordada por el Pleno de las Corts Valencianes. En la votación, en la que participaron 95 de los 99 diputados, todos los grupos instaron a Barberá a que renunciara a su escaño «para salvaguardar la dignidad de la representación de los valencianos».