No fue ayer el mejor día para la Empresa Municipal de Transportes (EMT), ya que cerró la jornada con uno de sus autobuses articulados quemados y el atropello de una mujer en la calle Garrigues.

Los dos sucesos se produjeron por la mañana. Entre las 8:30 y las 9 horas un autobús de la EMT se incendió en la Avenida Peset Aleixandre poco después de que una patrulla de la Policía Local advirtiera al conductor de que estaba echando humo y pudiera desalojarse a los pasajeros.

El vehículo estacionó en la calzada y 60 los pasajeros lo abandonaron ordenadamente y sin correr peligro. Apenas unos instantes el autobús estalló en llamas por su parte trasera. Se investigan las causas, aunque lo más probable fue un fallo del motor. El autobús articulado era uno de lo más viejos de la compañía, de 2006. La EMT ya adquirió en 2016 41 unidades nuevas, y ha encargado otros 37 nuevos convoyes, 14 de ellos articulados que tratan de rejuvenecer una flota muy envejecida en los últimos años.

Poco después, se produjo el segundo incidente grave para la EMT. Una mujer fue atropellada alrededor de las 10.15 horas por el vehículo que cubría la línea 27 en el cruce de la calle Garrigues con San Vicente.

La víctima, de 49 años, sufrió una brecha en la cabeza tras el golpe que le produjo el vehículo y fue trasladada al Hospital a Fe de Valencia. El grupo de atestados de la Policía Local de Valencia investiga los hechos, aunque fuentes consultadas por este periódico aseguran que el conductor del autobús tuvo que reaccionar a una peligrosa maniobra de una furgoneta.

A la mujer, que en todo momento estuvo consciente, se le practicó una TAC para evaluar el alcance de sus lesiones.

El PP lo relaciona con B. de Cárcer

Aunque el atropello se produjo en la calle Garrigues, el Partido Popular se apresuró rápidamente a relacionarlo con el cambio de sentido de la calle Barón de Cárcer. Así, el concejal Alberto Mendoza, no dudó en afirmar que el accidente «es consecuencia de la decisión de mantener el doble sentido de la avenida de Barón de Cárcer».

Mendoza argumentó que la línea 27, antes del cambio de Barón de Cárcer, llegaba hasta la intersección entre San Vicente y la avenida de María Cristina y que tras el cambio, ahora se desvían por Garrigues.

Protesta vecinal

Por otra parte, la Coordinadora de Ciutat Vella prepara hoy una acción de protesta en Barón de Cárcer por que consideran que el doble sentido es peligroso, y pintarán atropellos sobre la calzada para advertir a los peatones.