L'Oceanogràfic ha presentado a Kylu, el bebé beluga que, tras dos meses después de su nacimiento, y tras superar las etapas más críticas de su crianza, ya se exhibe en público. La pequeña ballena azul, un macho que ya alcanza los 130 kilos de peso y el 1,90 de longitud (el doble en ambos casos desde su nacimiento el pasado 15 de noviembre), es un caso único en los acuarios europeos, al haberse conseguido llegar a buen puerto tanto el embarazo como el parto y las primeras semanas de vida.

Todo ello ha sido posible por un trabajo metódico, y prácticamente desde cero, de los responsables del recinto de la Ciudad de las Artes y las Ciencias, que han realizado un seguimiento desde el primer minuto. La lactancia artificial es el gran éxito, ya que la relación materno-filial de alimentación no pudo materializarse de forma natural. Ahora, dos meses después, y habiendo superado los momentos más críticos del crecimiento y desarrollo, Kylu ya nada en la zona de l'Oceanogràfic dedicada al Ártico.