El director general del Consorcio, Vicent Llorens, presentó ayer la nueva marca comercial para la marina, que dejará de ser Marina Real Juan Carlos I y pasará a llamarse Marina de Valencia. Al menos en los documentos de promoción y en la señalización, puesto que el nombre oficial seguirá siendo Marina Real Juan Carlos I, denominación que en su día autorizó la Casa Real.

La nueva marca e imagen corporativa para este espacio, responde a «razones de toponimia» para que «todo el mundo» sepa „como también destacó el alcalde, Joan Ribó„ «que se habla de una marina que es de esta ciudad».

Ribó destacó tras la presentación de la estrategia y el plan financiero a los socios del Govern de la Nau, que la dársena «ha salido del túnel y está viendo la luz».

Pese a la falta de interlocución con el Gobierno para dirimir el futuro de la maria, el alcalde destacó que se está avanzando para convertir que este espacio contiguo al mar, se convierta tanto en lugar de uso público y disfrute ciudadano como en un enclave generador de economía y de empleo.

Ribó calificó de «muy ilusionantes e interesantes» los planes de Llorens para la marina de la que aseguró, ya se pueda decir que «ha comenzado a dejar de ser una zona de grandes eventos en la que no se sabe qué hacer». «La marina, dentro de pocos años, será un elemento fundamental de la ciudad» de Valencia. «Será el gran espacio, el gran mirador de la ciudad hacia el mar», destacó Ribó, quien subrayó que la capital valenciana «mira al mar» a través de este lugar.