La portavoz socialista y primera teniente de alcalde del Ayuntamiento de Valencia, Sandra Gómez, se ha mostrado partidaria de proteger la urbanización la Casbah, pero también el hotel Sidi Saler, ya que ambos se encuentran en las mismas circunstancias (dentro del dominio público terrestre) y ambos tienen interés para la ciudad, uno desde el punto de vista humano y vecinal, y el otro desde el punto de vista turístico y laboral. Aunque el equipo de Gobierno municipal, del que forman parte los socialistas, ha dictaminado contra el hotel y dentro de su partido hay posiciones encontradas al respecto, Gómez cree que la protección debe ser general, con todas las salvedades, eso sí, que imponga el parque natural en el que están enclavados.

En la actualidad, el Ayuntamiento de Valencia mantiene posturas muy diferentes respecto a las dos edificaciones más importantes que hay en el Parque Natural de la Devesa-Albufera, ambas también dentro del dominio público terrestre y por tanto fuera de ordenación. Eso significa que sus propietarios no lo son en su totalidad, sino que tienen una concesión del Estado que el caso de la Casbah es de 75 años.

Para el hotel Sidi Saler, un complejo de 5 estrellas cerrado hace cinco años, el consistorio ha emitido un informe contrario a su reapertura por encontrarse en las circunstancia antes descritas. Su idea es que este hotel desaparezca del parque, como deberían hacerlo todas las construcciones que hay en el mismo, opinan.

Sin embargo, cuando el temporal ha destruido el paseo marítimo de la urbanización la Casbah y ha puesto en peligro las viviendas, ha decidido invertir 600.000 euros en construir una escollera de protección, presupuesto que luego cargaría al plan de protección del litoral que se ha comprometido en aplicar la Demarcación de Costas.

Por lo que se refiere al PSPV, la opción del Govern ha sido apoyada implícitamente por el concejal de Desarrollo Urbano, Vicent Sarrià, pero dentro del Partido Socialista, principal socio de Compromís en el tripartito, hay distintas posiciones.

Ramón Vilar, concejal de Hacienda y Presupuestos, cree que si se protege la Casbah, cuestión que pone en duda entre otras cosas porque no es competencia municipal, ha de protegerse también el hotel Sidi Saler, cuya reapertura generaría alrededor de 200 empleos y también tiene unos derechos adquiridos después de tres décadas de funcionamiento.

Y a medio camino entre ambos está la postura de la portavoz del grupo, Sandra Gómez, que recoge la argumentación de sus dos compañeros y es partidaria de proteger la urbanización y el hotel.

En declaraciones a Levante-EMV, Gómez recordó que los vecinos de la Casbah tienen una concesión y unos derechos reconocidos por el Tribunal Supremo, lo que significa que el Ayuntamiento de Valencia tiene que darles una respuesta, en este caso, a su seguridad. Por tanto, cualquier medida que se adopte en este sentido puede ser apoyada por su grupo.

Pero de la misma manera entiende que el hotel Sidi Saler, aunque lleve 5 años cerrado por problemas económicos, también tiene sus derechos adquiridos, derechos que debería poder mantener la nueva empresa propietaria, Caixabank y el BBVA.

Su reapertura, solicitada por los nuevos propietarios y pendiente de una resolución de la Demarcación de Costas, sería un nuevo aliciente para el turismo de la ciudad y además generaría doscientos empleos.

En última instancia, la portavoz socialista valora el hecho de que ambas edificaciones estén en un parque natural y propone, de manera compensatoria, que para su reapertura se adopten todas las medidas medioambientales que marque la legislación en estos casos.