Ramón Vilar confirmó ayer la posibilidad que anunció el día de antes el Partido Popular sobre la subida del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) a las viviendas que permanezcan desocupadas mucho tiempo. El concejal de Hacienda del Ayuntamiento de València aseguró que, efectivamente, se está estudiando esa posibilidad, aunque con muchas variantes para no ser injustos.
Así, explicó que «no se va a cobrar a una familia que han muerto los padres y se les queda una vivienda vacía un tiempo». Tampoco están incluidas en esta posible reforma las viviendas que son claramente segundas residencias. «Lo que estamos pensando es cobrar ese impuesto a las viviendas declaradas primera residencia que estén mucho tiempo sin ocupar y cuando haya incluso más de una vivienda del mismo propietario», dijo. En este sentido, Vilar dijo que posiblemente se pondría un número de viviendas a partir del cual se cobraría esa tasa.
De todas formas, se trata de una posibilidad en estudio sobre la que no hay nada decidido.
Es más, Vilar dijo que antes de tomar ninguna decisión habrá que estudiar la «eficacia» del impuesto, porque «si el dispositivo necesario para censar las viviendas y cobrar el impuesto resulta más caro que lo que se va a recaudar, no vale la pena hacerlo». «Si esto cuesta más de lo que vamos a ingresar, no es efectivo», recalcó.
El Partido Popular ya había denunciado el día de antes la posibilidad de que se fijara este nuevo impuesto y mostró su completa oposición.
