La concejalía de Mobilitat Sostenible anunció ayer en la decimocuarta reunión de la Mesa de la Movilidad (la tercera plenaria) los cuatro grandes objetivos que se ha marcado para 2017: iniciar la segunda fase de remodelación de líneas de la EMT; poner en marcha la segunda etapa de la peatonalización de Ciutat Vella; impulsar la redacción de un plan de seguridad vial; y un plan rector para la bicicleta.

El concejal Giuseppe Grezzi aseguró que dentro «de unos meses» se realizará una nueva tanda de remodelación de líneas de la EMT, que irá acompañada de un proceso de participación dirigido por la propia compañía, tras el polémico proceso de la primera fase, con el rechazo de varias asociaciones de vecinos por la modificación de los recorridos.

Grezzi aseguró también que retomará el plan de peatonalización de Ciutat Vella, estancando tras la pacificación de la Plaça del Mercat o la creación de zona de preferencia peatonal en el entorno de la calle Serranos. A la espera de la instalación de cámaras de seguridad para el control de acceso de vehículos al centro histórico (un mandato ciudadano pendiente de los presupuestos participativos), la concejalía de Mobilitat Sostenible asegura que quiere «involucrar al máximo número de actores» para la segunda fase de este proceso, en el que se volverá a crear una mesa sectorial para discutir los detalles. Grezzi explicó que seguirá el concepto de «bucles» ya visto en Serranos, «donde está dando resultados muy positivos».

Otra de las «prioridades» será la de redactar un plan de seguridad vial, que no solo será una radiografía de la situación en la que se encuentra la ciudad, sino que propondrá «medidas concretas de actuación». Joan Olmos, coordinador de la Mesa de la Movilidad, añadió que este plan debe añadir el concepto de salud, con medidas que palíen la contaminación.

Por último, el concejal se comprometió a poner en marcha este año «un plan rector de la bicicleta», otra de las cuestiones que siguen pendientes en su concejalía, reconoció, y que busca «impulsar» el uso de este medio de transporte, «pero también que los usuarios de la bici respeten las ordenanzas».

Respeto del límite 30 km/h

En la Mesa de la Movilidad se realizaron diferentes peticiones de los colectivos. La Coordinadora de Ciutat Vella pidió que el ayuntamiento ponga medios para que se cumpla el límite 30 en el barrio, cuestión que hizo intervenir al Intendente de Tráfico, Abelardo Gil, quien argumentó que en el centro el respeto de la velocidad es mayor «del que se percibe subjetivamente». «Por la estructura viaria de las calles la sensación subjetiva es que se circula a más de 30 km/h, pero objetivamente no es así. Hicimos controles durante cuatro días y solo pusimos dos o tres denuncias. Tranquilidad», explicó.

La Asociación de Comerciantes del Centro Histórico pidió que se señalicen itinerarios alternativos para acceder a Jorge Juan una vez se han cerrado el paso tras los obras del carril bici de Colón. La concejalía asegura que ya lo tenían previsto.