«Es obvio que la mujer está discriminada en el trabajo, pero ahora tenemos un informe específico de Valencia que lo confirma». Con estas palabras la concejala de Empleo, Sandra Gómez, presentó ayer el informe encargado por el Ayuntamiento de Valencia sobre la situación laboral de las mujeres en Valencia, un documento según el cual las mujeres apenas representan el 37% de los autónomos y, por el contrario, tienen el 57% de los empleos temporales y el 67% de los trabajos a tiempo parcial. Y si hablamos de paro, sólo en tres años, entre 2007 y 2010, se perdieron 100.000 empleos femeninos en la ciudad.

Con este informe Sandra Gómez dijo tener un diagnóstico y una guía para «acertar» con las política de empleo y favorecer la inserción laboral de las mujeres. Servirá, además, de denuncia de la situación de desigualdad que padecen, con «más paro, más precariedad y menos promoción».

En concreto, el informe dice que apenas un 37% de los autónomos son mujeres y además constata que la mayoría de ellas son trabajadoras del hogar. He hecho, las mujeres copan el 96% de este sector. Sin embargo, en la precariedad son las primeras. Representan el 57% de los contratos temporales y el 67% de los contratos a tiempo parcial.

Y si hablamos de empleo, también las mujeres han sido las más perjudicadas por la crisis y las menos beneficiadas en la recuperación económica. Sólo entre los años 2007 y 2010 se destruyeron 100.000 empleos femeninos en la ciudad de Valencia, pasando de 249.878 a 149.862. Y si ampliamos el periodo de tiempo a la última década, el resultado es que entre 2007 y 2017, incluido ya los dos o tres últimos años de recuperación, la destrucción sigue siendo de 10.119.

En estos diez años, además, las cifras de paro se han doblado, pasando de 20.477 en el año 2007 a 4o.734 en 2017, una evolución muy negativa en números absolutos y también si se compara con la estadística de los hombres, pues hay 9.812 paradas más.

«Estamos muy lejos de lo que nos gustaría», dijo Sandra Gómez, que aseguró que el ayuntamiento hará todo lo que le permitan sus competencias para trabajar en ese sentido y contrarrestar la decisión del Gobierno de eliminar los planes de igualdad, una nefasta decisión, según la concejala.