Una de las consecuencias de la construcción del anillo ciclista ha sido la prohibición de aparcar motos en las aceras de todo el perímetro de la ronda interior. El Ayuntamiento de València ha creado cientos de plazas para ofrecer una alternativa a los usuarios motorizados de dos ruedas, pero aún así muchos siguen sin respetar las nuevas señales colocadas, bien sea por desconocimiento o por imprudencia.

La Policía Local de València está poniendo en práctica dos métodos para disuadir a los usuarios de motos de que aparcan en las aceras donde está prohibido aparcar. Así, en la calle Xàtiva, donde se ha prohibido estacionar en la acera de la Estació del Nord y en el nuevo carril liberado a la izquierda de la calzada, los agentes colocan pegatinas en el suelo que emulan a los adhesivos que se colocan cuando la grúa retira un vehículo. Es una manera de llamar la atención de los usuarios y advertirles de que, la próxima vez, su moto será multada y retirada al depósito.

Decenas de pegatinas naranjas aparecieron repartidas ayer junto a las motos mal estacionadas. La diferencia entre los adhesivos informativos y los punitivos es el color. Los primeros son naranjas, mientras en los que se impone la sanción y la consiguiente retirada son amarillo fluorescente.

El según método utilizado por la Policía Local es el de pasar a la acción, y ayer también se podían ver varias pegatinas amarillas con la consiguiente matrícula de la moto multada y retirada en la acera de la Estació del Nord donde antes se permitía aparcar.