La organización Acció Ecologista-Agró solicitó ayer la pacificación del tránsito en la carretera CV-500, que atraviesa l'Albufera convirtiéndose en «una barrera infranqueable para la fauna que se desplaza desde el bosque de la Devesa hasta el marjal».

La asociación también recordó que este tramo es uno de los «puntos negros» de atropellos de fauna a nivel estatal, y que esta demanda se remonta al pasado mes de enero, cuando la agrupación protagonizó una marcha reivindicativa para denunciar «las situaciones injustificables que continúa sufriendo la Albufera».

Además de los atropellos de animales, la agrupación incidió en un comunicado en otros problemas derivados por el tráfico de la CV-500, como su incompatibilidad con otros medios de transporte, por ejemplo la bicicleta: «No se puede entender un parque natural atravesado por miles de coches diariamente».

AE-Agró considera que hay que impulsar un proyecto global que analice la problemática de la velocidad en la CV-500 y que se centre en la accesibilidad. A su juicio, «se tiene que facilitar el acceso al parque natural sin dañar sus valores medioambientales».

AE-Agró explica que durante los últimos meses han visto o escuchado en los medios «protestas sobre determinadas actuaciones que se han llevado a cabo en la CV-500 a su paso por El Perelló y El Perellonet, así como sobre la reducción de velocidad en todo su recorrido y la ampliación de su acera de emergencia». «Desde Acción Ecologista-Agró entendemos que estas medidas estaban encaminadas a la pacificación del tránsito y la reducción de los impactos de esta carretera. Pero, siendo un tema sensible y complejo, no entendemos como se han ejecutado sin llevar a cabo un estudio riguroso y un plan de comunicación y participación, dada la importancia que tiene conseguir permeabilitzar esta vía y mejorar la calidad de uso del espacio por parte de peatones, ciclistas y usuarios del transporte público», explicaron en su comunicado.

Acceso sin daño medioambiental

Así, consideran que se tiene que facilitar el acceso en el parque natural a quienes viven, trabajan o visitan la Albufera, «pero siempre sin dañar los valores medioambientales». La organización recuerda que los problemas de la CV-500 no los provoca la escasa población que reside en El Saler o El Palmar, «sino el turismo masivo y el tránsito de paso que utiliza esta carretera para ir a Cullera o a la playa de Sueca, más allá de la Gola del Perellonet».

Por ello plantean que es necesario contemplar alternativas al paso por la CV-500, opciones que consistirían en buscar otro itinerario que envuelva el parque natural y que sea más atractivo de atravesar. El establecimiento de un transporte público eficiente que una El Perelló y El Palmar con València es otra de las medidas destacadas por la agrupación, que propone el uso de autobuses eléctricos con una elevada frecuencia de paso.

Además del impacto medioambiental de la carretera, Acció Ecologista-Agró definió como un «tema prioritario» el restablecimiento de una adecuada conexión integral entre El Saler y su puerto, «una reivindicación histórica de la Casa de la Demanà y sus vecinos», señalan desde la organización ecologista.