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Los contrastes de la ciudad

Un paseo dispar por Balmes

Una de las calles más representativas del barrio del Pilar aúna edificios históricos y preciosas viviendas, con solares, ruinas y prostitución

Un paseo dispar por Balmes

La castigada trama urbana de Velluters, como se conoce al popular barrio de El Pilar (por su pasado relacionado con los oficios de la seda), conserva aún ejemplos del esplendor que vivió antaño. Es sin duda la zona de Ciutat Vella más olvidada, aunque poco a poco sus edificios van cobrando la vida que se merecen. El paseo de por Velluters está plagado de reconfortantes momentos, como la calle Balmes a la altura de plaza de las Escuelas Pías, pero también está salpicado de recuerdos desagradables, como numerosos solares infectos, edificios en ruinas y un pequeño foco de prostitución en la calle Viana.

La frontera entre el paseo agradable o molesto en Velluters se puede concretar en la calle Balmes. Conviven edificios históricos como el del Gremi de Fusters, y otra serie de viviendas del siglo XIX totalmente rehabilitadas y preciosas, con otros donde una malla nos avisa del peligro de derrumbe. O solares, como el que da la bienvenida a esta céntrica vía, donde malviven personas sin techo.

Sin embargo, existen otros lugares verdaderamente encantadores, por ejemplo a la altura de la plaza de las Escuelas Pías, con un precioso bloque en curva al fondo de Balmes, una de las señas de identidad del barrio. Precisamente a sus espaldas encontramos otra muestra de esta bonita trama urbana semicircular en Peu de la Creu.

En cambio, si continuamos por Balmes andando nos damos de bruces con la otra realidad del barrio, focalizada en la calle Viana. La prostitución ha estado muy ligada a Velluters desde los años 70-80 del pasado siglo. Del entonces llamado barrio chino queda hoy bien poco, quizá su peor versión. Algunos vecinos echan de menos la «armonía» de antaño entre los que vivían, tenían sus negocios y las mujeres que ejercían. Hoy cuesta ver vecinos, ya no queda comercio y es incómodo transitar para los que no son clientes.

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