València vivió ayer un desfile de modelos muy particular. En él no había aparatosos vestidos ni peinados de impresión, ni caros complementos, sino historias de abandono y de necesidad reflejadas en los perros que más de 50 protectoras mostraron bajo el puente de las Flores en el marco de la cuarta feria de bienestar animal.

Los asistentes pudieron conocer la historia de «Odie», un perro de solo un año al que arrojaron de un coche en marcha en Vilamarxant y que está en adopción en la protectora Asia. O la de «Popi», un labrador de cinco años, que presentó la Asociación de Defensa Animal (ADA), al que le falta una pata, pero es todo energía y ganas de vivir. O la de «Kit», un pequeño luchador de siete años al que su familia abandonó porque iban a tener un hijo y que fue acogido por la protectora Luz Verde. Estas historias, que suenan tan desgarradoras, son la tónica habitual en las protectoras de animales que suelen estar desbordadas y que a lo largo de la jornada de ayer intentaron recaudar fondos, conseguir adopciones y captar a más socios y colaboradores en una jornada festiva y reivindicativa que se prolongó hasta bien entrada la tarde.

Una ley efectiva por fin

El presidente de la Federación de Asociaciones Animalistas de la Comunidad Valenciana (Fendeva), José Manuel Gil, indicaba que la «función de la feria es primero dar perros en adopción como cosa práctica, pero también concienciar sobre el tema del abandono, de la esterilización y de políticas que ayuden a que haya menos abandono, menos maltrato y mejor bienestar para todos los animales». Él recuerda que este año hay que estar muy atentos a la aprobación de la Ley autonómica de protección animal y espera que las asociaciones formen parte de ella.

En este aspecto legal se incidía también desde protectoras como Modepran. Además, su presidenta, Amparo Requena, lanzaba un mensaje para todos aquellos que quieran poner una mascota en su vida: «Si quieres un compañero da igual que sea de una raza o de otra. Cualquier animal mestizo, más aún si ha sufrido el abandono o el maltrato, va a ser el más agradecido del mundo».

Mientras que desde SOS Animales Sagunt resaltaban la dureza con la que se encuentran a diario: «hemos tenido todo tipo de casos de crueldad animal. Vemos a diario toda clase de barbaridades que el ser humano hace con los animales», lamentan.

Incógnita con el ayuntamiento

Un tema muy presente en la feria era el concurso para adjudicar servicios externos del refugio canino del ayuntamiento. Así, desde Pacma y desde la propia Modepran se criticaba que las «protectoras no pueden acceder al mismo» y ponían como motivos que se exija una fianza de más de 30.000 euros y una cierta cantidad de facturación que las protectoras «por ser entidades sin ánimo de lucro, no tienen».

Desde estos organismos se hace una llamada a la ciudadanía para que opten por la adopción, pero responsable, porque «un animal no es algo de unos meses que me puedo dejar luego».