El Ayuntamiento de València ha adjudicado a una clínica médica y a un particular los dos Audi A8 (uno de ellos blindado) de uso personal de la fallecida exalcaldesa Rita Barberá que habían vuelto a salir a subasta pública tras el primer intento fallido de enajenación. El lote primero se lo ha adjudicado por el precio de salida (18.000 euros) Villamón Pascual, una sociedad limitada a cuyo nombre está un centro médico ubicado en la calle Eduardo Boscá de València.

El segundo coche (el blindado) se lo ha adjudicado por 10.000 euros, tras una oferta a la baja, un particular, en concreto el médico valenciano, Adolfo Coloma Colomer, según la información que transcendió ayer en el proceso público de subasta, en el que se recibieron más de 24 ofertas.

Los servicios municipales comprobarán ahora si los adjudicatarios con carácter provisional de los coches están al corriente de los pagos con el ayuntamiento para poder adjudicárselos definitivamente, de modo que puedan pasar a retirarlos de los almacenes municipales.

El concejal de Gobierno Interior, Sergi Campillo, manifestó ayer su satisfacción por la operación. «Hemos recuperado 28.000 euros con la venta de los dos audis, que irán a las arcas municipales para ser gastados en cosas más importantes que en mantener dos coches de alta gama absolutamente incompatibles con la visión que tiene el Govern de la Nau de un uso racional de los recursos públicos», apuntó el edil. El alcalde, Joan Ribó, que habitualmente utiliza la bicicleta para sus desplazamientos, ya comunicó tras asumir el cargo su intención de jubilar los audis, un símbolo del anterior gobierno, y utilizar en caso de ser necesario uno de los coches Ford Mondeo, de fabricación local, de la flota de vehículos del ayuntamiento.

El precio de salida era de 18.032 y 14.860 (para el blindado). El Ayuntamiento de València sacó a subasta a principios de octubre del año pasado los Audi A8 adquiridos durante el mandato de Barberá como vehículos oficiales pero no hubo ninguna oferta y el proceso quedó desierto. En un primer intento los coches salieron a subasta por 32.892 euros en total y no se admitieron ofertas a la baja. Tras calibrar la posibilidad de enviar los vehículos al desguace, el ayuntamiento optó por volver a subastarlos por el mismo precio pero flexibilizando las condiciones y permitiendo ofertas a la baja, con un mínimo aceptable de 1.000 euros.

Tras estos resultados, la Junta de Gobierno Local decidió volver a realizar esta subasta, aunque con nuevas características. Los automóviles tienen 63.075 y 84.026 kilómetros y en su día el ayuntamiento pagó 300.000 euros por ellos (267.336,76 euros por el modelo a prueba de balas y 37.345,40 euros el vehículo de serie) . El blindado, adquirido por el ayuntamiento en 2004, tiene un alto peso y un elevado coste de mantenimiento, con un consumo de alrededor de 20 litros a los 100 kilómetros.

La Generalitat también ha sacado a subasta los vehículos de alta gama que utilizaban los expresidentes Francisco Camps y Eduardo Zaplana en sus desplazamientos.