Un joven finlandés de 21 años, al parecer estudiante erasmus, ha acabado en un calabozo de la Policía Nacional después de ser sorprendido destrozando a pedradas, con rocas de jardín, varios coches estacionados en una calle de València.

Los hechos sucedieron a las 3.30 horas del martes pasado, cuando el ahora arrestado fue visto por un conductor que circulaba por la calle Bachiller cuando rompía lunas, retrovisores, puertas y ventanillas de varios coches estacionados en la calle Botánico Cavanilles, junto a Viveros. El hombre le llamó la atención y por toda respuesta el estudiante cogió una de las rocas y la estampó sobre su coche, destrozándole el capó y la luna.

El conductor llamó de inmediato al 091, el teléfono de emergencias de la Policía Nacional, y denunció los hechos. Un coche patrulla que estaba cerca llegó enseguida y detuvo al sospechoso unos metros más allá. Al inspeccionar la zona, vieron que, además del vehículo del denunciante, había destrozado otros seis más, de las marcas y segmentos más dispares. Sólo en uno de ellos, provocó daños que superan los 3.000 euros. De hecho, a uno de los coches no sólo le rompió a pedradas todas las ventanillas y las lunas, sino que además le hundió las puertas y el techo. De momento, no ha querido explicar la razón de su acto vandálico.