Rain Forest Valencia, S.A. se encargará de habilitar nuevos espacios y desarrollar proyectos en la parcela de 25.000 m2 que lindan con la Avenida Pío Baroja y el Parque de Cabecera. Así, la empresa expuso al Ayuntamiento de València el pasado mes de abril los proyectos que tiene previsto realizar desde ahora hasta el año 2019. Esta propuesta cuenta con un importante componente acuático: ríos lentos y rápidos, playas fluviales o el innovador «canyoning» donde gente de diferentes edades podrán interactuar con el agua.

Contará con puentes tibetanos, tirolinas y pasarelas con un alto componente de acción y aventura. Basado en el agua y el aire, todas las experiencias girarán en torno a estos elementos ya que se trata de acercar la naturaleza a la ciudad y de sumar a la experiencia contemplativa de la visita a Bioparc una experiencia activa de inmersión en un elemento emblemático de la capital del Turia, el agua.

Quedaba pendiente definir el proyecto de recreación paisajística de dichas actividades y finalmente ha sido Asia la opción elegida. Así en este nuevo parque fluvial de aventura con elementos de naturaleza se incluye una gruta subacuática y la recreación de un templo de Angkor que nos trasladará a las a míticas ciudades del imperio Jemer que fueron engullidas por la jungla. Vegetación exuberante, esculturas en piedra, rocas de lava y un edificio que combina el ladrillo rústico con sillares de piedra tallada adentrarán a los asistentes en un ambiente de aventura selvática.

Este proyecto lo está desarrollando el equipo de Rain Forest Diseño en colaboración con la empresa valenciana Amusement Logic, de amplia experiencia nacional e internacional. El parque completo tiene una inversión estimada entre 12 y 15 millones de euros, con la creación de 50 a 70 puestos de trabajo directos. Y su inauguración está prevista para verano del 2019.

La otra parcela ubicada en la colina mirador junto a Pío Baroja se destinará al parque de animales en hábitats asiáticos y albergará especies animales amenazadas

El otro trabajo es la remodelación de la plaza de acceso a Bioparc que se convertirá en espacio de bienvenida al público y en vertebrador de las diferentes propuestas de ocio. Dicho proyecto se basa en la colocación de elementos que resultarán icónicos y emblemáticos para la ciudad.

Un bosque de acacias realizadas en metal y ratán aportarán el ambiente en que se situará un majestuoso elefante de madera y acero de 15 toneladas, 11 metros de largo y 8 de alto. Esta actuación estará finalizada en la primavera de 2018.