El portavoz de Juventud del Grupo Popular en Les Corts, Juan Carlos Caballero, ha exigido "una actuación urgente" en el Colegio Mayor Luis Vives de València por parte de la Generalitat para "poner en valor un edificio histórico que debe ser rehabilitado para evitar su progresiva degradación".

Caballero ha indicado que el conseller Marzà "debe tomar cartas en el asunto" porque "la situación de abandono del edificio es total y no se ha adoptado ninguna medida de protección por parte del Consell o de la Universitat, lo que ha provocado que lleguemos a la vergonzosa situación actual".

Caballero ha defendido que "hay que devolverle la dignidad a un edificio esencial para la sociedad valenciana y para que este sea de utilidad para todos los valencianos, no para unos pocos que han decidido ocuparlo ilegalmente".

Ha denunciado "la pasividad" de la Universitat a la hora de expulsar a los "okupas" de sus instalaciones y su "complicidad con unos pocos que ocupan ilegalmente el edificio público, mientras privan del uso a la mayoría, a estudiantes e investigadores que se podrían beneficiar y generar talento y capital humano", ha indicado.

El portavoz popular ha anunciado la presentación de una proposición no de ley (PNL) en Les Corts, en la que instarán al Consell a llevar a cabo las actuaciones necesarias para reabrir el Colegio Mayor Luis Vives, como residencia de estudiantes y también como un centro cultural de referencia para la sociedad valenciana".

Otra de las propuestas es "convertirlo en un centro para la recepción de estudiantes de Erasmus y como polo de atracción de talento internacional, albergando a investigadores procedentes del extranjero".

En la propuesta parlamentario se solicitará igualmente "programar actividades culturales para recuperar su función como espacio abierto a toda la ciudadanía y dotar al conjunto arquitectónico de la protección necesaria, con el fin de evitar futuros atentados que tiendan a desnaturalizar el estilo, concepto y fisonomía original de este edificio".

La última medida consiste en "garantizar, en caso de que se acometiera en un futuro cualquier proyecto de rehabilitación del inmueble, que se respete tanto la estructura como los detalles constructivos del edificio, siguiendo las más modernas teorías respecto a la conservación del patrimonio", han añadido.

Juan Carlos Caballero ha indicado que "el Consell y la Universitat deben velar por la preservación y conservación de su patrimonio histórico-artístico, también de la ciudad y de todos los valencianos, por lo que no se comprende que permanezca cerrada esta histórica institución", ha concluido.

Entre tanto, la Universitat de València ha reforzado con un segundo vallado el recinto del Colegio Mayor Luis Vives para evitar un nuevo asalto como el protagonizado ayer por unos 40 okupas, diez de los cuales pudieron acceder al interior de las instalaciones, donde continúan.

Así lo han asegurado fuentes de la institución universitaria, que han señalado que este edificio "histórico" y "emblemático" sigue siendo protegido por diez vigilantes de seguridad privada.

La Universitat de València no ha pedido la intervención policial para desalojar el Colegio Mayor y ha reclamado el "abandono pacífico" del edificio para preservar el patrimonio y por la "seguridad de las personas", ya que su estructura está dañada y está en "condiciones inhabitables".

La institución recibió ayer la notificación del juzgado de Instrucción en la que se le traslada la posibilidad de personarse en el caso, y está estudiando si hacerlo o no.

El Colegio Mayor Luis Vives de València fue cerrado en el año 2012 tras detectarse "graves problemas estructurales" en el edificio y desde entonces se ha trabajado en el análisis de diferentes alternativas para poder rehabilitarlo y recuperarlo para usos universitarios, aunque la limitación presupuestaria lo ha impedido.

Fuentes de la Universitat han señalado que han solicitado la licencia de obras para hacer una rehabilitación integral de la estructura del inmueble, que necesita un informe de Patrimonio al estar protegido, y una vez la consigan buscarán financiación.

El primer asalto al Colegio Mayor se produjo el pasado 1 de mayo, cuando una veintena de okupas entró en el edificio. Un día después dos vigilantes de seguridad resultaron heridos al intentar impedir que otro grupo de okupas se sumaran a los que ya había en el interior.

Ayer, un grupo de 40 personas desmontaron parte del vallado de seguridad que rodeaba el edificio y diez de ellos se introdujeron por las ventanas y sustituyeron a otros cuatro okupas que permanecían en el edificio.