«Jesús Barrachina era un valencianista de pro». La frase, con voz lacónica y contundente, fue de Pedro Cortés. El expresidente del Valencia CF, visiblemente dolido por la pérdida de quien para él fue como un hermano, refleja con precisión la figura de quien durante dos etapas fue consejero del club de Mestalla y ejerció de portavoz del club en los años más laureados de su historia con Jaime Ortí de presidente.

Jesús Barrachina Luna mamó la afición al fútbol de la mano de su padre, Jesús Barrachina Fajardo, que falleció hace siete años siendo el socio número 5 del Valencia. Esa afición siempre le llevó a Mestalla. Hasta llegar a convertirse en vicepresidente del club. «Era una persona atípica y especial. Yo lo quería mucho. Para mi era como un hermano. Se me murió uno y ahora se ha muerto otro. Lo he querido mucho», explicaba Pedro Cortés. «Era un valencianista de oro, uno de los grandes valencianistas de la historia», añadió.

Una de las virtudes de Jesús Barrachina siempre fue la de desdramatizar el mundo del fútbol. Fue mediador en un club como el Valencia CF que siempre ha vivido una clima de inestabilidad social tremendo. Y lo hacía siempre con una sonrisa. Con una broma. Pese al enfrentamiento, Barrachina siempre fue una persona «que daba cariño», reconocía el expresidente del club, Francisco Roig. «Tenía esa virtud que tienen muy pocos, la de dar siempre cariño», apuntaba.

«Cuando me han dado la noticia me he dado un sobresalto. Son cosas de la vida, todos nos tenemos que morir, pero yo lo he sentido mucho. Jesús era un hombre especial, una persona educada y amigo de sus amigos. Yo lo tuve conmigo como directivo del Valencia CF. Recuerdo que cuando fuimos a fichar a Romario me reí muchísimo con él. No había nadie mejor que él para tenerlo a su lado», explicaba Roig. En este sentido, y durante su etapa como directivo del Valencia, Jesús Barrachina supo congeniar con presidentes, entrenadores y jugadores. Quien lo conoció siendo jugador primero y luego como directivo de la entidad, fue Javier Subirats. «Te dabas cuenta de que era una persona cercana, y eso los futbolistas lo valoran».