El servicio de oncología del Hospital Arnau de Vilanova de Valencia recibió ayer la donación de pelo para sus enfermas procedente de una acción solidaria fallera. Un total de 45 piezas, entre pelucas y contornos, fueron entregados como producto de la donación de una de las principales firmas de posticería del ramo como es Realce -la que donó los postizos a las falleras mayores y cortes de honor de 2017 a través de la peluquería Teresa Caballer-.
Las donaciones son de pelo natural de las clientas -existe la costumbre entre no pocas falleras de hacerse un corte de pelo significativo al acabar las fiestas- y, tras el necesario tratamiento, se han convertido en las piezas para las enfermas.
«La idea surgió tras el interés de varias clientas en ayudar, de alguna forma, con la donación de su pelo» aseguraba la propietaria Loli Montero. En este caso, esta donación tiene una estrategia especial para evitar la picaresca que se ha detectado en campañas de este estilo, extendida últimamente en la fiesta: las donantes pueden saber a qué se ha destinado su pelo e incluso tiene la posibilidad de que la persona que reciba su donación pueda contactar con ellas.
La donación, además, es gratuita: es el servicio de de psicooncología del hospital será el encargado de valorar la situación de cada paciente, con el fin de que se pueda beneficiar a aquellas personas con una situación económica más complicada, que no tendrán que abonar dinero por las piezas asignadas.
