«Estoy destrozado, he perdido unos 2.000 euros con este incendio y en esta feria ya va a ser imposible recuperarlo, pero somos trabajadores y hay que seguir adelante». Estas palabras de Francisco Martí, uno de los afectados por el incendio que tuvo lugar la madrugada del sábado en cuatro puestos del Mercat de l´Escuraeta de València, reflejan la frustración y el dolor que provocó el acto de unas personas todavía desconocidas, pero que se sospecha que sean unos jóvenes o unos borrachos que pasaban por allí.

El suceso tuvo lugar sobre las siete de la mañana en las paradas ubicadas a la izquierda de la puerta principal de la Catedral de València. Al parecer, se inició en un puesto de souvenirs y otros productos regentado por un joven marroquí y se extendió, sobre todo, hacia la parada de su izquierda, de la cual es dueño Francisco Martí, y que estaba destinada a productos de barro.

Este alfarero, perteneciente ya a la cuarta generación de vendedores en la Escuraeta, negaba rotundamente que pudiera tratarse de algún acto racista o por odio hacia él u otro puesto, y comentaba que, más bien debió ser «una gamberrada de unos jóvenes o un acto de algún borracho. O tal vez una colilla tirada sin miramiento». No obstante, también recordaba que unos días antes ya habían tirado una colilla al toldo de uno de los puestos cercanos.

Sea como fuera, Martí incide en que en la Escuraeta «todos nos conocemos desde hace muchos años, nos llevamos bien y somos como una gran familia de alfareros y artesanos».

Ahora, con su parada destrozada, atiende a los clientes en otro puesto cercano perteneciente a su familia, pero asegura que las pérdidas ya van a ser irrecuperables: «No voy a volver a poner ese puesto porque no tenemos género para los dos y hemos tenido muchas pérdidas. Eran productos para preparar comida y había caído encima corcho y poliespan quemado y ya estaba todo para tirar».

Los tenderos de los puestos cercanos como el de Ana Marí o el de Juan José Fernández tampoco recuerdan algo similar y esperan que no se vuelva a dar.