La comisión de Desarrollo Urbano aprobará el próximo lunes el proyecto de reparcelación de la primera fase del Parque Central, cuyo ajardinamiento, según diseño de la paisajista Kathryn Gustafson, ya está en ejecución y será inaugurado en el primer trimestre del año próximo.

La aprobación de la reparcelación, una vez superado el proceso de alegaciones, es fundamental para poder sacar a la venta las pastillas de suelo edificable de este ámbito. La sociedad Valencia Parque Central, donde están representadas las administraciones central, autonómica y local implicadas en la solución ferroviaria de València, confían en los aprovechamientos urbanísticos de este ámbito para financiar al menos en parte los túneles ferroviarios pendientes.

Las obras de ajardinamiento, que se financiación con un crédito a favor de la sociedad Parque Central, arrancaron sin estar aprobada la reparcelación, que la citada sociedad presentó hace más de un año al ayuntamiento, y mediante acuerdos privados con los propietarios del suelo. La mitad del suelo del PAI del Parque Central es propiedad pública, si bien hay numerosas parcelas privadas cuyos propietarios y arrendatarios han alegado en el proceso de reparcelación. Entre ellos, el dueño de un concesionario de venta de coches de segunda mano, que ha reclamado sin éxito una indemnización económica por el menoscabo económico que le supondrá el cierre o traslado del negocio.

El ayuntamiento ha recibido un total de 25 alegaciones, una de ellas de la propia sociedad para repartirse con otro propietario colindante del 50% de una parcela de «titularidad dudosa». También han alegado algunos propietarios por la ausencia del expediente de tasación y la Sareb, el denominado banco malo, con intereses en el ámbito por considerar que la reparcelación vulnera el reparto equitativo de cargas.