Una barra para vender bebida y comida atenderá a los asistentes a una verbena. El problema está en que el puesto en cuestión está pegado a los muros e la Iglesia de Santa Catalina y los vecinos han puesto el griito en el cielo, sobre todo porque la la Ley e Patrimonio His´torico prohibe espresamente todo tipo de actividades ruidosas que imìdan o perturben la contemplación del bien. santa catalina está declarada BIC desde 1981 y la asociación de vecinos de la Boatella ya han advertido que denunciarán al ayuntamiento e valència por incumplir la ley ya que los organizadores disponen de autorización municipal.

la concejala de Patrimonio, Gloria tello,s in embargo, tan solo puntualizó que,m en un futuro «trabajaremos con mayor celo para que esto no se repita».

Los vecinos, por su parte, estaban indignados ya que al «además de los problemas añadidos de masificación y seguridad, las repisan que confoirmanb lso arcos del tenplo son utilizadas como barras de bar». Por ello, desde la Boatella exigen al ayuntamiento «que nos e otorgue niungún permiso en los entornos monumentales protegidos, bajo ningún concepto».