El Ayuntamiento de València cerró ayer el aparcamiento subterráneo de uso público del tanatorio municipal, así como la sala de tanatopraxia, el almacén en zona sin uso y los almacenes de floristería tras las deficiencias detectadas en la última inspección municipal. Así, la delegación de Cementerios, que dirige Pilar Soriano, ha exigido a Funespaña, la empresa que gestiona esta instalación y el crematorio público, una solución inmediata a los problemas revelados.

«No solo velamos por el cumplimiento de todas las condiciones del contrato con la empresa concesionaria de la gestión de estos espacios sino que, además, exigimos una respuesta urgente a todas las incidencias relacionadas con la seguridad de las personas usuarias de estas instalaciones», aseguró la concejala delegada de Cementerios, Pilar Soriano.

La regidora explicó que el Ayuntamiento se ha puesto contacto con la empresa concesionaria y ya se han tomado decisiones urgentes, como cerrar al público el aparcamiento. «Sabemos que puede generar molestias para las personas que acuden a estas instalaciones pero la seguridad de todas ellas es la prioridad máxima para el gobierno municipal», afirmó Soriano, quien destacó que todas las incidencias calificadas como graves o muy graves en el informe de la empresa que ha realizado la inspección «deben abordarse de forma inmediata» por parte de la empresa concesionaria.

Algunas instalaciones deben dejar de prestar servicio con carácter inmediato, según ha exigido el Ayuntamiento a la empresa concesionaria, como el aparcamiento subterráneo de uso público, que ya está fuera de servicio, la sala de tanatopraxia, el almacén en zona sin uso y los almacenes de floristería en la zona exterior y en parte del restaurante, dado que en las condiciones actuales no se justifica el cumplimiento de la normativa asociada a la actividad ejercida. «Entendemos que medidas tan drásticas son necesarias por los riesgos que comportaría en caso de incendio la combinación de elementos de protección en mal estado», resaltó Soriano.

Un contrato para 35 años

En enero de 2013 la Junta de Gobierno Local acordó autorizar a la cesión de la explotación a la empresa actual por parte del anterior empresa adjudicataria (FCC), con la consecuente asunción de todos los derechos y obligaciones derivados de la adjudicación inicial. El contrato está vigente hasta el año 2033.

Algunas de las incidencias detectadas se derivan de la construcción del edificio; otras, del tiempo transcurrido y el uso normal que se hace; otros, por cuestiones de diseño y por problemas de mantenimiento. «El Ayuntamiento confía en la celeridad de la respuesta de la empresa concesionaria, dado que algunas de las incidencias detectadas, las más urgentes, se corresponden a fallos totales de gestión por falta de renovación o actualización de equipos», explicó la concejala.

El informe concluye que la inversión realizada en conjunto no se corresponde con la establecida en el plan de negocio presentado a su día en la licitación. Éste planteaba la sustitución de instalaciones cada 18 años, que se cumplirán en 2018. La inversión prevista en el Estudio Económico de la licitación era de 320 millones de pesetas (1,9 millones de euros).

A partir de las estimaciones indicadas, y considerando la simultaneidad de actividades en todo el complejo, se considera que el plazo total en el que podrían corregirse las deficiencias mencionadas es de casi 24 semanas.

Solución urgente

Entre las incidencias que requieren una solución urgente está la puesta marcha de los sistemas de detección de incendios y de detección de monóxido en el aparcamiento, así como la adecuación de las emergencias en todo el edificio y la reparación de puertas en las cajas de escaleras.

Además, el Ayuntamiento también ha exigido que se dote inmediatamente de un sistema de ventilación y superpresión a las cajas de escalera, la adecuación de estructuras para que tengan la resistencia al fuego necesaria, la adecuación a la normativa vigente de los cables y las conexiones eléctricas y de alumbrado en zonas de acceso público con riesgo de contacto eléctrico, la apertura de la puerta de salida del almacén de la cafetería durante las horas de servicio, la reparación del cierre de cubierta y la instalación de líneas de vida homologadas permanentes para los trabajos de mantenimiento, así como la sustitución del sistema de control para permitir que funcionen las instalaciones.

La inspección también ha permitido detectar todo un conjunto de incidencias que se recomienda resolver con brevedad, como la oxidación de armaduras en los forjados, la reparación del suelo del vestíbulo interior de las salas de vela, la adecuación de las salas de tanatopraxia y espacios vinculados o la construcción de vestíbulos de independencia en el aparcamiento de vehículos funerarios.

En el informe de la inspección también se enumeran algunas incidencias que pueden ser relevantes a medio plazo, como la necesidad de mantenimiento preventivo de los chapados en zonas húmedas o sanitarias.