Los representantes de Podemos en València en Comú, su marca instrumental para las elecciones municipales, han propuesto formalmente la sustitución del portavoz en el Ayuntamiento de Valencia, Jordi Peris, el único de los tres ediles que es independiente, por la concejala María Oliver, que pertenece a la formación morada. Aunque esa posibilidad ya se venía barajando desde hace tiempo, la propuesta, realizada formalmente en la Mesa de Coordinación del pasado martes, coincide con uno de los momentos más bajos del propio Peris, muy cuestionado por la destitución del gerente de Las Naves, Rafael Monterde.
Los argumentos de Podemos para proponer la sustitución de Peris como portavoz de València en Comú en el Ayuntamiento de València son la necesidad de ir rotando a los cargos públicos, la voluntad de colocar a mujeres en esos primeros puestos y ganar cohesión interna, algo que en los dos años de legislatura se había ido perdiendo.
La petición, en cualquier caso, coincide con uno de los momentos más bajos de Jordi Peris desde el punto de vista político. Su decisión de destituir por cuestiones de estética al gerente de las Naves, Rafael Monterde, por su relación con el caso Cooperación, lo ha puesto en el punto de mira de la oposición y de sus propios compañeros de partido, incluida la corriente que lidera el ex militante de EUPV Manuel Colomer, que nunca creyeron los argumentos de Monterde ni de Peris e insisten en la vinculación del primero con la trama de Rafael Blasco.
La reacción de Peris
Peris, sin embargo, parece haberse tomado la maniobra con aparente tranquilidad. Ayer mismo emitió un comunicado en el que asegura que la propuesta para relevarlo en la portavocía municipal «es un posición legítima que se plantea, además, en el espacio orgánico adecuado, que es la mesa de coordinación». «Espero que con esta iniciativa, por fin, todas aquellas personas que han estado intrigando en la sombra sobre este asunto durante demasiado tiempo dediquen todos sus esfuerzos a aquello para lo que realmente vinimos aquí, que es hacer política municipal para mejorar la ciudad», añade.
Jordi Peris cree que los argumentos de la propuesta son «coherentes». «Desde una perspectiva feminista como la que estamos intentando aplicar en todas nuestras políticas es, sin duda, importante que los puestos de responsabilidad de nuestra propia estructura, no sólo la institucional sino también la orgánica, sean ocupados por mujeres», explica. Y sobre la necesidad de ir rotando los cargos de responsabilidad asegura que «es la mejor práctica democrática, porque aquí nadie hemos venido a ocupar sillones».
Ahora bien, una vez dicho eso, el concejal de València en Comú y segundo teniente de alcalde pide que el debate sobre el cambio de portavoz sea «profundo y sereno». A su juicio, «es una decisión que deberá tomarse sin personalismos y en función de cuál es la mejor opción para el desarrollo del proyecto político y del programa de València en Comú».
Para terminar, Jordi Peris advierte de que «dada la trascendencia de la decisión, en última instancia deberá ser ratificada por una asamblea ciudadana».
Por lo pronto, en la mesa de coordinación del pasado martes no hubo decisión al respecto y todo parece indicar que volverá a debatirse en una mesa que se convocará a finales de mes.
