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Asamblea

València en Comú afronta un profundo cambio en sus áreas "para mejorar cosas"

La asamblea decide hoy la reorganización del grupo municipal en la que ningún edil mantendría exactamente sus funciones

València en Comú afronta un profundo cambio en sus áreas "para mejorar cosas"

El Govern de la Nau vivirá hoy, en el ecuador de la legislatura, la primera reestructuración profunda en las tres concejalías que competen a València en Comú. El grupo municipal afronta esta tarde una asamblea cuyo plenario ha de aprobar la propuesta para variar el reparto originario tras el Pacto de la Nau. De salir adelante la iniciativa, habría una redistribución de competencias entre los tres ediles, según fuentes de la formación morada. «Son modificaciones para mejorar cosas», es lo máximo que ayer trascendió al respecto, pues nadie quiso adelantar cuestión alguna «por respeto a la asamblea». A nadie se le escapa el daño que hicieron las palabras de Jordi Peris en su despedida, cuando sentenció que el proyecto «había fracasado»

De cumplirse los pronósticos se rompería el camino abierto por el PSPV el pasado verano con la marcha de Joan Calabuig. Entonces Sandra Gómez asumió las competencias íntegras de Calabuig y pasó las suyas a la edila entrante Anaïs Menguzzato, pese a que Joan Ribó abrió la puerta a una reasignación de áreas de mayor calado. Algo rechazado por los socialistas. Aunque el secretismo impera en la propuesta que hoy se debatirá, todo apunta a que María Oliver podría asumir el Plan Edusi (Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible Integrado) del Cabanyal, que estaba en manos de Peris.

Oliver ha mostrado siempre una defensa férrea del barrio marítimo, chocando de forma frontal con el equipo de gobierno cuando la Universidad Europea privada buscaba terrenos para establecer su nueva sede. Lo lógico es que Educación y Juventud pasaran a manos de Neus Fábregas. Esta última es especialista en temas de cooperación e inmigración, que ahora recaen en Roberto Jaramillo, con idénticas funciones en la Diputació de València. Ahí podría generarse un pulso, aunque Jaramillo también controla Transparencia y Gobierno Abierto.

Más complicado resulta pensar que València en Comú vaya a renunciar a alguna de sus delegaciones, pese a que la transversalidad del Govern de la Nau lo permitiría. Esa posibilidad eliminaría puntos de conflicto en áreas como Cultura, donde María Oliver y Glòria Tello (Compromís), han tenido sonados encontronazos a cargo de la gestión de una y otra. También con el PSPV, que tiene Planificación y Gestión Urbana, así como Obras, mientras VLC gestiona Patrimonio Municipal y Vivienda. Compromís defiende las concejalías de Patrimonio y Recursos Culturales (literatura, música y audiovisual), además de la de Cultura Festiva que dirige Pere Fuset (Fallas, Gran Fira de Juliol y Navidad). València en Comú tiene Acció Cultural (escénicas y bibliotecas), aunque en la concejalía de Innovación y Gestión del Conocimiento, que llevaba Peris, está la Fundación InnDEA que gestiona Las Naves. Una cesión de alguna de ellas a los socios de gobierno sería bien vista por éstos, aunque ayer mostraban serias dudas de que vaya a producirse.

En la cita de esta tarde se han de colocar también sobre la mesa los nombres para ocupar la secretaría del grupo, tras la marcha de Áurea Ortiz. En cuanto al apartado de asesores municipales vacantes, se suma la plaza que deja libre Fábregas, que entrará cuando reciba el acta que ha de enviar la Junta Electoral y se convoque pleno extraordinario para su nombramiento.

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