El Ayuntamiento de València se reafirmó ayer en su intención de municipalizar el servicio de recogida de animales y la gestión del refugio de Benimàmet, tras el episodio de brote de moquillo en las instalaciones de esta pedanía. Para la concejala Glòria Tello es «esencial» asegurar el bienestar de los animales allí acogidos, más de 400.
Tras declararse el concurso de gestión del refugio desierto, la Concejalía de Bienestar Animal ultima el nuevo procedimiento, en el que sacará a licitación «por lotes» los distintos servicios. Así se externalizará el suministro de pienso, medicinas o recogida de animales, pero al estar dividido por lotes permitirá que, por ejemplo, una protectora de animales pueda optar a la retirada de animales en la vía pública y al cuidado de los mismos en el refugio de Benimàmet, que se pretende ampliar.
«El proceso va tan rápido como los trámites administrativos lo permiten; hay un técnico trabajando en esta cuestión hace varios meses», señaló Tello a este periódico. Según la concejala al licitar el concurso por lotes «se diversifican los servicios prestados, lo cual también supone rebajar las exigencias y permitir que las protectoras puedan presentarse, por ejemplo, a la retirada de animales de la calle».
«En todo caso, el control será municipal 100 % y con esta municipalización garantizamos que los animales tengan todo lo que necesiten», insistió la concejala de Bienestar Animal, convencida de que la gestión actual es claramente mejorable.
