La falta de recursos que llevan tiempo reclamando los sindicatos de policía ha alcanzado su punto álgido y desde la noche del miércoles el grupo de Atestados de la Policía Local de València cuenta con un único etilómetro evidencial con validez jurídica, situado en la base de la avenida del Cid, para cubrir las pruebas realizadas en toda la ciudad. La policía no tiene ninguno en propiedad y de los tres aparatos cedidos por la Dirección General de Tráfico (DGT) solo hay uno en funcionamiento, ya que los otros dos están pasando las revisiones periódicas y la DGT no cuenta con ninguno de sustitución.
Desde el Ayuntamiento sostienen que «la Policía Local dispone de los recursos suficientes para practicar las pruebas de alcoholemia con normalidad». Así, fuentes municipales afirman que «los agentes disponen de todos los etilómetros digitales para practicar las pruebas de alcoholemia en los emplazamientos donde éstas se realicen y validarlas con un etilómetro evidencial en el supuesto de que se requiera». Dicho etilómetro está en las dependencias de Atestados en la avenida del Cid.
No obstante, en aquellos casos en los que la tasa de alcohol detectada por el alcoholímetro indiciario no sea constitutivo de delito sino de una mera sanción administrativa, en los que el conductor dé una tasa por debajo de 0,60 mg/l pero superior de 0,25 mg/l, la policía no podría obligar a la persona a trasladarse a dependencias policiales para realizarle esa segunda prueba con validez jurídica ni se le podría sancionar al no contar con la prueba válida. De ahí la importancia de contar con al menos un aparato móvil además del que está fijo en la base de Atestados.
En condiciones normales y con los tres etilómetros de precisión funcionando, uno se queda en las dependencias policiales y los otros dos van en cada una de las dos furgonetas de Atestados, que acuden al servicio tras ser requeridos porque el conductor ha dado positivo en el evidencial, una patrulla ha detectado signos externos de encontrarse ebrio o se ha visto involucrado en un accidente con heridos. Con un solo alcoholímetro de precisión fijo en la base, las colas de conductores en Atestados para ser sometidos a la prueba son desde el miércoles una constante.
Los otros dos etilómetros evidenciales están pasando la revisión de verificación periódica. Según confirmaron fuentes de la Policía Local, «estos equipos no han podido ser repuestos por la DGT por falta de unidades, pero esta circunstancia no afecta a la prestación del servicio». Los sindicatos han reclamado la compra de aparatos de precisión, mientras que fuentes municipales aseguran que ya está prevista la adquisición de etilómetros evidenciales propios.
