El hallazgo de una decena de bombonas de gas butano en una vivienda de titularidad municipal ocupada del barrio del Cabanyal ha alertado esta semana a la policía local de València. La acumulación de bombonas de butano que posiblemente antes del atentado yihadista de Barcelona habría pasado inadvertida llamó la atención de los responsables de la limpieza y tapiado del inmueble ocupado que alertaron a la policía local. Tras la llamada, los agentes realizaron una inspección constando que las botellas estaban vacías y no representaban un riesgo aparente para los vecinos.

La Concejalía de Protección Ciudadana ha restado importancia a este hecho porque además de constatar que las botellas estaban vacías, se ha comprobado que la vivienda había estado ocupada por familias gitanas, que tienen en la venta de butano sustraídas una práctica habitual.

La acumulación de basura y residuos de todo tipo en viviendas ocupadas del barrio preocupa a los vecinos que alertan de que algunos inmuebles son un polvorín. «Cualquier día pasará algo», alerta el portavoz de Salvem el Cabanyal, Faustino Villora. La Sociedad Plan Cabanyal trabaja esta semana, tras la denuncia de una vecina, en la retirada de la basura acumulada en el patio de una vivienda municipal en la calle Lavadero. Del interior se han retirado más de siete toneladas de basura, con abundante presencia de jeringuillas (utilizadas por los toxicómanos que frecuentan los puntos de venta de droga del barrio).

Villora confirmó a este diario el repunte de la ocupación de viviendas en el Cabanyal. Este verano «ha sido insufrible» la vida en el barrio, lamenta. El anunciado proceso de desalojo y regeneración de las viviendas municipales (cerca de 500 con casi un centenar ocupadas) no termina de arrancar. Los vecinos aseguran que tampoco aprecian medidas contra el narcotráfico y alerta del deterioro creciente de la convivencia en zonas especialmente conflictivas como el entorno de la calle Los Ángeles y Pescadores. «Los vecinos se sienten amenazados» por algunas de estas familias ocupas. Tal como informó este diario, la sociedad Plan Cabanyal y la policía han intervenido en ocho nuevos intentos de ocupación de viviendas del ayuntamiento.

La mediación con las familias ocupas, afirman los vecinos, no se está realizando y el efecto llamada no se corta. Los vecinos aseguran que las acciones de la policía local contra la ocupación no pueden acabar en un mero recuento y deben tener seguimiento y consecuencias, apuntan los vecinos. Salvem el Cabanyal estudiará en su próxima asamblea tras la vuelta de las vacaciones nuevas medidas de protesta por el retraso en los planes de regeneración del barrio anunciados por el Govern de la Nau y la Generalitat, como la llevada a cabo el pasado mes de julio en la calle Colón, donde los vecinos escenificaron como es la vida cotidiana en este castigado barrio.

Reunión el jueves

Mientras se siguen esperando las medidas contra la degradación social y del patrimonio inmuebles, los equipos redactores del nuevo plan especial del Cabanyal y del programa Edusi han convocado una reunión conjunta este jueves para informar a los vecinos de las acciones y propuestas para la revitalización del barrio, que incluirán medidas no solo de mejora urbanística, también ambiental y de carácter social.

Los vecinos, apunta Villora, «nos sentimos frustrados». El veterano dirigente vecinal afirma que varias concejalas del Govern de la Nau, formado por Compromís, PSPV y València en Comú, se han puesto en contacto con la plataforma -tras la accidentada visita del alcalde. Joan Ribó, y el presidente Ximo Puig al Cabanyal en mayo- para conocer sus propuestas de mejora del barrio. Si bien «las medidas que planteamos, como la mediación con los ocupas, no se llevan a cabo».