El Partido Popular, a través de su portavoz, Eusebio Monzó, lamentó, tras conocer las nuevas ordenanzas fiscales aprobadas ayer por la Junta de Gobierno, que, por tercer año consecutivo, «se suba la presión fiscal en València». Esto iba referido a la nueva tasa a grandes compañías de gas, teléfono o electricidad que ya anunció el jueves el concejal de Hacienda, Ramón Vilar. Monzó critica esta medida porque considera que «cualquier subida de impuestos a grandes compañías tendrá una repercusión directa en los recibos de los contribuyentes, en este caso de los valencianos». Y asegura que es una decisión «totalmente innecesaria teniendo en cuenta que el Ayuntamiento de València dispone de recursos más que suficientes».
En este sentido Monzó se preguntó «para qué quiere Ribó recaudar más si es incapaz de ejecutar el dinero del presupuesto municipal» y ha recordó que «desde que gobierna el tripartito en Valencia -en tres años- han subido el IBI, han subido el Impuesto de vehículos, han implantado una nueva Tasa por telefonía móvil, han subido también la Tasa por Ocupación del Dominio Público con Mesas y Sillas y ahora otra Tasa a las Compañías eléctricas, telefónicas y gasísticas».
El edil popular afirma que el Partido Popular apuesta por todo lo contrario: «nNosotros preferimos aliviar la carga fiscal de los valencianos». Y recuerda «que el partido popular fue el único que se opuso desde el primer momento a la subida del IBI».
También lamenta que «el tripartito haya hecho que València deje de ser una de las ciudades españolas con menor presión fiscal», y ha declara que «las subidas de impuestos y los desencuentros de los miembros del tripartito acerca de proyectos importantes para el futuro de nuestra ciudad, está provocando que los inversores elijan otras ciudades».
