La coordinadora de Esquerra Unida de València, Rosa Albert, lamentó ayer que tanto el Ayuntamiento como el Consell «vuelvan a incumplir sus programas electorales, en este caso respecto a la apertura en domingos y festivos en la ciudad», una situación de la que ha subrayado la existencia de «datos objetivos que recogen que la implantación de la libertad horaria ha tenido consecuencias nefastas para el pequeño comercio». Albert indica que la libertad horaria conlleva «la pérdida de miles de empleos y tampoco ha servido para crear empleo en las grandes superficies, sin olvidar las consecuencias para los trabajadores afectados».

«Desde EUPV siempre hemos sabido que es un tema complejo, pero volvemos a recordar al alcalde de València, Joan Ribó, que el Ayuntamiento puede proponer las zonas de gran afluencia turística y por lo tanto puede volver al planteamiento inicial de limitarla a una», matiza.