El Ayuntamiento de València ha reducido su consumo eléctrico en los dos últimos años un 17% y ha logrado ahorrar en este tiempo hasta 3,3 millones de euros en la factura de la luz. Este año, y viendo la evolución del gasto en electricidad, destina medio millón de esa partida a inversiones de eficiencia en los edificios municipales.

Según explicó ayer el regidor de Gobierno Interior, Sergi Campillo, «la gestión del día a día en un Ayuntamiento como el de nuestra ciudad debe ir encaminada, prioritariamente, a satisfacer las necesidades de la gente. Al mismo tiempo, este Gobierno también es capaz de ahorrar, de usar bien los recursos públicos, con eficiencia, y lo ponemos en práctica con esta inversión en nuevas medidas de ahorro valorada en medio millón de euros».

De los 500.000 euros, 130.000 se traspasan a la partida de mantenimiento de edificios para realizar las certificaciones energéticas pendientes de edificios municipales. Otros 120.000 euros se traspasan a la partida de mantenimiento de colegios para realizar las certificaciones energéticas pendientes de colegios.

Por otro lado, 150.000 euros se destinan a la partida de mantenimiento de edificios para ejecutar proyectos de eficiencia energética, concretamente de sustitución de iluminación a un sistema LED. Los otros 150.000 se traspasan a una partida idéntica, en este caso de mantenimiento de colegios, para ejecutar proyectos de eficiencia energética de sustitución de iluminación a sistema LED.

Efecto multiplicador

La realización de inversiones en eficiencia energética hace que los ahorros se sigan incrementando. Hay que recordar la intervención que se está llevando a cabo en estos momentos en todos los distritos de la ciudad, que supone la renovación del 30 por ciento del parque lumínico urbano, y que incluye la sustitución de bombillas incandescentes y halógenos a bajo consumo y LED cálido, a través de un plan de ayudas del Ministerio de Industria, por importe de 4 millones de euros y un ahorro anual previsto de casi dos millones de euros.