El éxito de la llegada del portaeronaves Juan Carlos I al Puerto de València, que congregó a más de 8.400 visitantes durante el fin de semana, no ha estado exenta de algunos problemas en la zona. Durante la jornada de ayer se produjeron grandes atascos en los alrededores de la Marina Real que incluso provocaron que algunos coches quedaran atrapados en el interior de parkings, al no poder salir de ellos por el caos circulatorio generado.

Según testigos, en las inmediaciones no había ninguna patrulla de Policía Local que pudiera poner orden en la entrada y salida de vehículos por lo que "muchas personas llamaron al 112 tras permanecer una hora y media atrapados en el atasco". Estos mismos testigos declararon su "miedo" por si "hubiera pasado algo grave" puesto que la presencia de niños pequeños y gente mayor en la zona, junto a las altas temperaturas eran un cóctel peligroso si hubiese sido necesario llevar a cabo un traslado de urgencia.

Miles de valencianos se trasladaron hasta la zona del puerto de València para visitar el gran buque de la Armada Española que organizó una jornada de puertas abiertas durante el fin de semana. Ayer al mediodía finalizó su estancia en la ciudad y puso rumbo a su base situada en la localidad gaditana de Rota. Según fuentes de la organización, el sábado se registraron un total de 5.000 visitas, mientras que ayer fueron 3.400 las personas que se desplazaron para conocer los entresijos del que es considerado como la «joya» de los buques españoles. El Juan Carlos I cuenta con 231 metros de eslora y tiene una capacidad de desplazamiento de 27.000 toneladas.