València estrenó el pasado 19 de octubre la primera red de «motosharing» sin estaciones, es decir, un servicio de alquiler de motos compartidas y eléctricas -primera peculiaridad- y que se arriendan en la propia calle -segunda singularidad-. Los usuarios pueden buscar mediante una app para móvil dónde está la moto más cercana, desbloquearla, realizar su trayecto, y estacionarla donde quieran (en las plazas de aparcamiento públicas). La empresa gaditana Muving es la primera que pone en marcha este servicio en el "cap i casal", de momento con una flota de unos 45 vehículos eléctricos y con un precio de 0,18 euros el minuto. La empresa asegura que el tiempo medio por recorrido suele ser de 10 minutos.

Muving se adelanta de esta manera al gigante chino OFO, que con un modelo de negocio similar pretende desembarcar en València con miles bicis de alquiler en la calle y que, pese a estar ya lista para trabajar, todavía no se ha puesto en marcha, probablemente a falta de licencia de actividad. En cuanto al «carsharing», muy implantado en ciudades como Madrid o Barcelona, todavía no ha dado señales de vida en el «cap i casal».

Muving fue elegida como la 'Start up' más Innovadora de 2017 de entre todas las que se crearon en España este año. La empresa gaditana, que usa motocicletas eléctricas Torrot -compañía también española- ya ha puesto en marcha su servicio de motos compartidas en Madrid, Sevilla, Cádiz, Málaga, Barcelona, Zaragoza y Granada. Ahora llega a Valencia con la baza de la sostenibilidad, ya que sus vehículos son de cero emisiones.

Aunque en València ya funcionaba Cooltra como principal empresa de alquiler de motos, éstas se arriendan en diversos puntos de atención al cliente y se han de devolver en el mismo lugar. Cooltra tiene su versión "cero emisiones" denominada eCooltra, que se ofrece con bonos diarios, semanales o mensuales. La versión de alquiler en la calle mediante app solo está disponible en Barcelona y Madrid.

Muving cuenta con una flota de motos Torrot eléctricas, con unos 110 km de autonomía y que se alquilan con dos cascos. Toda la gestión se realiza mediante una app, que nos indica el lugar más próximo para coger una moto, reservarla con anterioridad, el nivel de batería que le queda y el tipo de carnet que necesitamos para usarla, aunque de momento todas son compatibles con el permiso A1 o B -coches y motos hasta 125 cc-. La aplicación indica los lugares permitidos para estacionar el vehículos, siempre dentro de la ciudad.