La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de València dio ayer un nuevo paso para resolver el conflicto con la concesionaria del servicio de grúa. Según anunció la primera teniente de alcalde, Sandra Gómez, el consistorio ha llegado a un acuerdo de 2,4 millones de euros con la empresa que actualmente presta este servicio, Pavapark (Pavasal) para rescindir el contrato y lanzar una nueva licitación pública. Esta cifra, aunque supondrá un desembolso para las arcas públicas, es bastante inferior a la de 15 millones de euros que se manejaba cuando se empezó a hablar de esta actuación, en julio de 2016, pues era la cantidad que solicitaba la empresa. Aunque más tarde la rebajó a 11 millones.

Ya entonces desde el ayuntamiento se argumentó que esta decisión se producía debido, principalmente, a que no estaba funcionando en condiciones, que los tiempos de espera eran demasiado largos y que no había suficientes grúas en la calle, a lo que se añadía el mal ambiente generado en la plantilla por los despidos.

Gómez destacó ayer, en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno Local, que con este acuerdo se evitará la vía judicial y el consecuente coste para las arcas municipales. "Se ha hecho una buena gestión, puesto que el acuerdo evita la vía judicial y el consiguiente coste o gravamen que podría derivarse de ello para las arcas municipales", destacaba la edil.

Después explicó que Pavapark seguirá prestando el servicio durante un periodo que será de "entre tres y nueve meses mientras el Ayuntamiento prepara el nuevo proceso de licitación y adjudicación". La edil explicó que ya cuentan con nuevo material y argumentó que tanto la empresa como el ayuntamiento habían solicitado el cambio porque consideraban que no era positivo para ninguna de las partes. Ahora, añadió, habrá que delimitar cuestiones como los tiempos de actuación, el número de grúas y otras.

Por otra parte, Gómez matizó a Levante-EM que ayer se había aprobado ya el pago de 800.000 euros de esta compensación y que en la próxima Junta de Gobierno se llevará a cabo la cantidad que resta, que será de 1,6 millones de euros. La primera teniente de alcalde agregó que con la nueva adjudicación se pretende "mejorar la calidad de la prestación y ofrecer a la ciudad un mejor servicio que es, en definitiva, el objetivo de la actividad".

Este asunto ya viene de lejos pues la anterior contrata, Cleop, incumplió sus obligaciones económicas, entró en concurso de acreedores e incluso estuvo implicada en el caso Taula.