No hay festividad a lo largo del año que ponga tan en juego los extremos del estado emocional en pocas horas de diferencia. Pero no menos cierto es que el público para cada evento no es coincidente. Anoche, miles de personas recorrieron la ciudad en clave de disfraz, baile, comida y alcohol bajo el paraguas de la fiesta de importación más extendida por la ciudad. En realidad, más que Halloween, no es más que una macro fiesta de disfraces, en algunos casos con botellón incluido, mientras que sólo en determinados casos se incluyen algunas de las liturgias propias, como el «truco o trato» (propio de colegios o comisiones de falla), visionado de películas de terror o lectura de relatos de miedo.

La realidad es más prosaica: la que obligó a la Policía Local a desplegar un amplio dispositivo para minimizar los daños que pudieran provocar los muertos vivientes. Sabiendo que la noche sería larga porque, hasta bien entrada ésta, lo único que había era personas transitando a los locales de ocio. Primero, los inofensivos grupos familiares y sólo después ya los que precisaban de más atención para prevenir que determinadas zonas de la ciudad (Plaza del Ayuntamiento, donde también había una batería de ambulancias, Russafa, Plaza del Carmen, de Manises, Virgen, Benimaclet o Tarongers) tuvieron la menor cantidad de desperfectos. Al cierre de esta edición, la animación seguía contenida, a la espera de que se prolongara durante la madrugada.

todos los santos

El último gran día de visitas

Sin solución de continuidad, el alba de 1 de noviembre anuncia la última gran sesión de visitas a los cementerios de la ciudad. El ayuntamiento ha dispuesto desde hace diez días todo el operativo de y el hecho de que el día caiga en miércoles ha propiciado que ya hayan sido miles los que han cumplido con el ritual de embellecer y limpiar las lápidas en los camposantos. Aun así, hoy se espera una afluencia masiva tanto al Cementerio General como a los pequeños camposantos de barrio que existen en la ciudad y sus pedanías.

visitas institucionales

La concejala Pilar Soriano irá a todos los camposantos

La concejala de Cementerios, Pilar Soriano, iniciará la serie de visitas a los cementerios a las 9 horas en el de El Palmar, para trasladarse después al del del Grau y al de El Cabanyal. A partir de las 11.20 horas, Soriano visitará el Cementerio de Massarrojos para posteriormente acercarse al de Benimàmet y Campanar. A las 12.45 h está previsto que la comitiva llegue al Cementerio General, donde hará un recorrido por el «río de la vida», el monolito de víctimas del franquismo y el Cementerio Civil.

Cañizares impartirá dos misas

Si la del ayuntamiento sería una visita con un marcado carácter laico, el cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares protagonizará la versión religiosa y visitará hoy y mañana el Cementerio General, donde oficiará dos servicios religiosos: hoy a las 13 horas en la capilla por los secardotes fallecidos este año y mañana a las 16 horas una de campaña en la explanada, para la que se habilitarán sillas. Asimismo, la capilla del Cementerio General acogerá hoy misas a las 10, 11, 12 y 16 horas; y, el jueves, a las 10, 11, 12 y 13 horas.

museu d´etnología

«Monstres valencians», la alternativa autóctona

El Museu Valencià d'Etnologia, celebra el ciclo «Espanta la por! Per Tots Sants, monstres valencians», con una propuesta llena de actividades, dirigidas al público adulto e infantil, que pretende reivindicar la existencia en el imaginario colectivo valenciano de monstruos propios, como el Butoni, l'Home del Sac, les bruixes, la Tarasca, els donyets o el Drac del Patriarca, así como fomentar la lectura de la literatura popular valenciana donde estos personajes son protagonistas de cuentos y leyendas.

El Museu abre hoy además sus puertas a quienes deseen acudir a la grabación del podcast «La Escóbula de la Brújula», uno de los más descargados sobre historia, leyendas, misterios y lugares mágicos.

Cementerios

Empiezan las exhumaciones

Una vez se haya celebrado la festividad de Todos los Santos empezará la labor de exhumación en aquellos nichos que, una vez finalizada la concesión, los deudos de los allí enterrados no hayan hecho efectivo el pago de la renovación, para lo que disponen de los próximos quince días. Ese es uno de los motivos por los que en numerosos nichos figura ya una pegatina con la leyenda «Avis. Per a exhumar». Los restos pasarán al osario general.