El atasco provocado por las toallitas higiénicas en el colector norte de la ciudad, de más de un kilómetro de largo, es más grave de lo que ya se pensaba inicialmente y tardará más en resolverse. Así lo han asegurado fuentes del Ciclo Integral del Agua, que aseguran además, que las alertas por lluvia obligan a parar los trabajos dentro del colector por el riesgo de avenidas.

El atasco está situado en el colector norte, a la altura de la Ciudad de las Artes y las Ciencias, y para eliminarlo se han desviado las aguas residuales y se ha limpiado la sección de pluviales, que está en la parte superior del colector y que sirve de plataforma para limpiar el atasco, que está en la parte inferior, a través de una especie de ventanas que las comunican.

Pero después de semanas trabajando, la tarea parece complicada, lo que significa que puede extenderse en el tiempo y costar más de los dos millones que ya se han presupuestado.

Al parecer, el sistema de rastrillos que va arañando el tapón entre ventana y ventana saca las toallitas muy poco a poco, lo que hace que el trabajo resulte muy lento. Además, los trabajos tienen que interrumpirse permanentemente por las alertas de lluvia de estos días. Se corre el riesgo de que una fuerte tromba de agua, muy propias de esta época, desplace una gran cantidad de agua al colector de pluviales y sorprenda a los operarios en pleno trabajo. Este martes, sin ir más lejos, había alerta por lluvias moderadas y hubo que suspender las labores de limpieza y sacar toda la maquinaria al exterior. Los trabajos continuarán hoy una vez superada esa alerta.

Desde el Ciclo Integral del Agua se indica, en cualquier caso, que lo importante es que la sección de pluviales esté limpia, como ya está, para que el agua desaloje fácilmente. Y respecto al tramo de residuales, que es el atascado, aseguran que no hay grandes problemas al tener desviado el colector por otras tuberías cercanas. Eso sí, la intensidad de los trabajos es muy alta, incluso con turnos de noche.