La campaña de limpieza presentada por la delegación de Gestión de Residuos Sólidos de València apostaba el lunes por cuatro premisas que mantengan limpia la ciudad. Se trata de promover el reciclaje, utilizar las papeleras en la calle, recoger los excrementos de las mascotas y, por último, concienciar a la población para depositar los residuos en los contenedores entre las 8 y las 10 de la noche.
Este último mensaje ha tenido una buena acogida entre los servicios de limpieza de la ciudad. Desde la Sociedad de Agricultores de la Vega de València (SAV), una de las entidades que presta el servicio de recoger los desechos urbanos de los contenedores, aseguran que su colaboración con el ayuntamiento es plena.
"Cuanto más tarde se tire la basura, estará menos expuesta en la calle y se generarán menos olores", declaró Antonio Aguilar, presidente del Comité de Empresa de la SAV. La ordenanza municipal de Limpieza Urbana, publicada en 2009, contempla este horario como el más conveniente. Señala que "el depósito deberá producirse exclusivamente entre las 20 horas y el paso del camión recolector". Aguilar explica que los camiones de basura se dividen en dos rutas. La primera sale a las 10 de la noche y finaliza a las 4 de la madrugada, y la segunda inicia su servicio a las 5 y termina a las 9 de la mañana.
Sin embargo, Vicente Inglada, presidente de la Unió de Consumidors de la Comunitat Valenciana, mostró su escepticismo ante el cumplimiento de esta premisa. "Hay una labor pedagógica importante, la gente tira la basura a lo largo de todo el día". Inglada cree que es muy difícil cambiar los hábitos y rutinas sociales. "Las medidas han de tomarse en base al uso y costumbre de los ciudadanos" afirmó.
"El ayuntamiento decide qué horario tienen los camiones en cada barrio", explicó Aguilar, aunque reconoce que en el centro histórico la recogida de basura se lleva a cabo en horario nocturno.
"No queremos entrar en conflicto con los ciudadanos, pero hace falta concienciación", lamenta Aguilar. Para él, la ciudad más limpia es la que menos se ensucia, y hace un llamamiento para que las bolsas no se dejen fuera de los contenedores. Precisamente la ordenanza municipal de Limpieza Urbana prohíbe explícitamente "depositar ningún tipo de residuo fuera del contenedor".
