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Sostenibilidad

Primeros pasos hacia la movilidad eléctrica

València encarga a una consultoría que desarrolle un proyecto para desplegar una red pública de cargadores para vehículos de emisiones cero

València está dando los primeros pasos para llegar preparada a la gran revolución eléctrica que todos los fabricantes automovilísticos han dibujado en el horizonte. La Concejalía de Mobilitat Sostenible acaba de adjudicar a una consultoría un estudio para que desarrolle un plan de actuación para dotar a la ciudad de una red de puntos de recarga públicos. El compromiso político es que este servicio de 'electrolineras' esté listo o a punto antes de que finalice el presente mandato.

El 'cap i casal' no puede permitirse más prórrogas en su compromiso por una movilidad sostenible, en la que el vehículo eléctrico será una pieza clave para esta gran transformación. Los cálculos más optimistas sitúan el ocaso de los vehículos diésel en torno a 2030, año en el que, por cierto, numerosas ciudades de medio mundo se han comprometido a reducir un 40 por ciento las emisiones de dióxido de carbono (CO2), entre ellas el 'cap i casal'. Así pues, el futuro del transporte a medio-largo plazo será eléctrico, pese a que se investiga sin tanto entusiasmo en otras energías alternativas.

Pero la realidad, la cruda realidad, no es tan halagüeña para los que sueñan con una ciudad por la que circulen exclusivamente vehículos de emisiones cero. València empieza a dar sus primeros pasos en esta dirección tras años de total indiferencia ante el desarrollo de la movilidad eléctrica. Ahora ha comenzado a comprometerse con la causa.

El concejal del área, Giuseppe Grezzi, recuerda que de las primeras medidas que tomaron al llegar al Govern de la Nau fue la de bonificar un 75% en el impuesto de circulación para estos vehículos de cero emisiones y todo tipo de híbridos. En otras ciudades, sin embargo, no se abona nada. También asegura que en la futura ordenanza de circulación, que reformulará el estacionamiento regulado, los coches eléctricos podrán aparcar gratis en la zona azul o naranja, como ocurre en otras grandes urbes.

Pero al margen de los beneficios fiscales, el sector del vehículo eléctrico demanda la creación de una red pública para la recarga de los coches. Y ahora parece que, por fin, se desarrollará. La Concejalía de Mobilitat Sostenible ha adjudicado a la empresa Edenway SL la redacción de un plan estratégico para el fomento de la movilidad eléctrica en la ciudad de València. El trabajo de campo durará cuatro meses y tras él se propondrá desplegar la infraestructura de recarga necesaria para el impulso vehículo eléctrico en la ciudad.

La consultora deberá incluir, independientemente de los requisitos técnicos de los distintos equipos, el estudio sobre legislación y normativa aplicable, así como de los posibles incentivos de los que pudiera beneficiarse el ayuntamiento (ayudas europeas).

Para realizar el trabajo de redacción del plan, la concejalía consultó con dos empresas especialistas en la elaboración de este tipo de proyectos, "por lo específico de la materia y la necesidad que teníamos de tener solvencia demostrada de las mismas", explican. Finalmente, tras estudiarlas se ha optado por contratar a Edenway, que entre otras cosas lleva a cabo la asistencia técnica para el desarrollo de la movilidad eléctrica en San Sebastián.

La situación actual

Hablar del vehículo eléctrico en España y València es hacerlo de un parque de vehículos mínimo, pero cuyas espectativas de crecimiento son enormes. Basta con ver la evolución de las ventas en España. En octubre de 2017 se alcanzó la histórica cifra de 1.354 unidades de eléctricos e híbridos enchufables frente a las 510 de 2016 y los 318 de 2015.

En València, ante el prácticamente nulo impulso al vehículo eléctrico, las ventas decrecieron. Según la Oficina Estadística, en 2015 se matricularon 50 coches, furgonetas o motocicletas de emisiones cero (no contabilizan los híbridos), mientras que el año pasado la cifra cayó a 42 unidades. En cambio, en 2017 todo indica que la cifra se disparará, como en el resto del Estado.

La ciudadanía e incluso los gobiernos se preguntan por qué hay que invertir en puntos de recarga eléctrica con un parque de vehículos tan reducido. Es la pescadilla que se muerde la cola, sin una infraestructura mínima no habrá evolución en las ventas. Y sin la expansión de estos vehículos de emisiones cero, nunca se cumplirán los objetivos de reducción de gases contaminantes.

En la provincia de València, según Electromaps, existen actualmente 79 estaciones de recarga eléctrica en hoteles, centros comerciales o aparcamientos, la mayoría de carga lenta. En el «cap i casal» la cifra se reduce a 28 terminales, que en total ofrecen 75 puntos. Solo 11 de ellos son de recarga rápida o semirrápida.

La mayoría de las estaciones se ubican en aparcamientos públicos, de hoteles o de centros comerciales. En algunos se paga solo la tarifa del estacionamiento y la recarga es gratuita, pero en otros también cobran la carga eléctrica. También existen varios puntos rápidos en concesionarios de marcas que venden vehículos eléctricos, como Nissan, Renault o Mitsubishi, pero son exclusivos para sus clientes.

La apuesta de Tesla

Por su parte, la compañía que está capitalizando gran parte de la revolución eléctrica, la estadounidense Tesla, estrenó hace pocas semanas un punto de venta en el Hotel Las Arenas, donde además instaló dos terminales de «carga en destino». También cuenta con otras dos estaciones en el Hotel Hospes Palau de la Mar y otro punto en el Hotel B&B Valencia Ciudad de las Ciencias. Su intención es ir inaugurando más «cargas en destino», que permiten recargar hasta 100 kilómetros de autonomía por hora. Su infraestructura se completa con el «supercargador» en el Hotel Posadas de España de Paterna, junto a la A-7. Tiene cuatro puntos que acumulan energía para 250 km en solo 20 minutos.

La cifra de puntos de recarga de la ciudad aumentará exponencialmente con la instalación de los 40 terminales de carga convencional que se habilitarán en el futuro aparcamiento de Brujas, impulsado por el Ayuntamiento de València. Su puesta en marcha está prevista para finales de 2018 o principios de 2019.

168 puntos más en la CV

Por otra parte, la Conselleria de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo, a través de Ivace Energía, respaldará este año la implantación de un total de 168 puntos de recarga para vehículos eléctricos en el ámbito de empresas privadas.

Del total de los puntos de recarga que el Ivace va a subvencionar, un total de 15 son de recarga rápida, que tardan 20 minutos en una recarga completa, 64 de semirápida, que necesitan alrededor de 2 horas para la recarga y el resto corresponde a puntos de llenado lento. Los puntos de recarga de este tipo necesitan 6-7 horas aproximadamente para realizarla.

De acuerdo con los datos del Ivace, estos terminales evitarán la emisión a la atmósfera de 1.237 toneladas de CO2 al año y, a su vez, permitirán anualmente un ahorro de 450.000 litros de combustible.

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