El atasco del servicio de licencias, denunciado por los empresarios y admitido por el equipo de Gobierno municipal, está siendo uno de los grandes quebraderos de cabeza de esta legislatura. Se dice, en fuentes municipales, que en licencias puede haber hasta 8.000 solicitudes pendientes de resolución, algunas de ellas con más de un año de demora.
Y eso está generando situaciones cuando menos singulares dentro del departamento, una de ellas la asunción por parte del concejal de Comercio y Espacio Público, Carlos Galiana, de la potestad de decidir qué peticiones tienen prioridad y cuáles se quedan a la cola. Proyectos como l'Alqueria del Basket, la reforma de la clínica Quirón o el Consum han sido sacados del montón para no demorarlos.
Y lo mismo ocurre en el departamento de licencias, donde van desde una obra menor, a una peluquería o la reforma de un hospital. Es el grueso de las peticiones que llegan al ayuntamiento. Y ahí también ha habido situaciones complejas derivadas de los movimientos en Urbanismo, pues el jefe de servicio sustituido en esta delegación debía volver a su puesto en Licencias y ese movimiento no fue aceptado de buen grado por el concejal Carlos Galiana.
Lo que sí consiguió el concejal de Comercio y Espacio Público, con el apoyo de los tres socios de Gobierno, fue reforzar su autoridad en la materia hasta el punto de tener la potestad de decidir personalmente qué expedientes se resuelven con celeridad y cuáles se quedan a la cola.
Acuerdo en Junta de Gobierno
En junio del año pasado, la Junta de Gobierno Local aprobó una moción del propio Galiana según la cual «los proyectos dirigidos a la puesta en funcionamiento de actividades económicas de cualquier sector productivo (industrias, establecimientos públicos, servicios terciarios a la comunidad, etc.) son consideradas de interés especial municipal, por lo que toda actuación administrativa necesaria para su puesta en funcionamiento tiene el carácter de prioritaria, condición que se le asignará por decisión de la Delegación de Espacio Público».
Y para finalizar «se determina que la ejecución funcional de las instrucciones que contiene este acuerdo sean concretadas por el concejal delegado de Espacio Público», es decir, el propio Galiana. «Se autoriza expresamente al citado regidor para que requiera la colaboración de los servicios y otras unidades administrativas auxiliares que resulten necesarias para llevar a término el propósito de este acuerdo», concluye.
Y claro, esta moción tiene dos interpretaciones. Según fuentes conocedoras del sistema, esta priorización de licencias, además de introducir criterios personalistas en la gestión, está haciendo más larga la resolución de los demás expedientes, es decir, está contribuyendo al atasco general que hay en este momento.
Por contra, desde la propia concejalía se asegura que esta decisión permite sacar adelante los proyectos que «contribuyen al desarrollo económico y la creación de empleo», cuestiones vitales en estos momentos para la ciudad.
En esa lista de proyectos que se han considerado prioritarios y, por tanto, han sido sacados del montón de expedientes para darles salida inmediata, está el nuevo establecimiento de la marca Primark en el pasaje Doctor Serra; la construcción de l'Alqueria del Basket; reformas en el hospital Quirón de la avenida Blasco Ibáñez; adecuación de las plantas segunda y cuarta de la Casa de la Salud; reforma del edificio quirúrgico del Hospital General; instalación de una sala de baile en el Alameda Palace; construcción de un supermercado Consum en la antigua discoteca Arena de la calle Emilio Baró; modificación del edificio Veles e Vents de la Marina; ampliación de la tienda de Massimo Dutti en los locales que ocupaba Cortefiel en la calle Colón; la segunda fase de Bombas Gens con un centro de menores y de enfermedades raras como la de Wilson; ampliación de la oficina de La Caixa en la Plaza del Ayuntamiento; instalación de la Agencia Estatal Tributaria en la Plaza del Ayuntamiento; el Palacio de los Valeriola o el estadio del Valencia CF. Se trata de licencias de envergadura, algunas de las cuales ya están terminadas, otras en marcha y otras que aún no han empezado, asegura la concejalía.
