La auditoría a los procesos de contratación en las Naves (la fundación que aglutina a Inndea y València Crea) realizada por Waribo Consultores destaca el "paso adelante" en materia de transparencia que han supuesto las contrataciones llevadas a cabo por el Govern de la Nau, si bien matiza que hay aspectos mejorables y aconseja que se vaya más allá y se tome como referencia en las convocatorias el Estatuto Básico del Empleado Público "aunque los puestos a cubrir no tengan carácter funcionarial".
Se trata, apuntan los auditores, de garantizar los principios constitucionales de acceso a la función pública, como la transparencia en el proceso, la no arbitrariedad, así como el respeto a los principios de igualdad, mérito y capacidad.
Los procesos de selección impulsados por la Concejalía de Innovación, controlada por València en Comú (marca blanca de Podemos en València) en la fundación "aun partiendo de buena base, podrían mejorarse en algún punto, como la descripción del puesto, que, en algunos de los procesos, es excesivamente escueta para reflejar todos los contenidos, sobre todo porque son puestos objetivamente interesantes por sus contenidos, funciones y objetivos".
El concejal de Innovación, Roberto Jaramillo, ha utilizado esta auditoría para dejar en evidencia que las contrataciones realizadas durante la época del PP en Inndea no respondieron a criterios objetivos de selección y sirvieron para colocar a personas afines al PP.
Una de las premisas de la auditoría era realizar un análisis comparativo de las contrataciones de la época del PP, donde se contrataron a varios familiares de concejales del PP, con las realizadas por el Govern de la Nau, que también se han cuestionado por enchufismo.
Como se ha publicado, entre el personal seleccionado por València en Comú se incluyen personas del entorno de Podemos y EU. Sobre la etapa del PP, la auditoría destaca la falta de información y "huella" documental de los contratos.
Según el informe de Waribo, "basándonos en las entrevistas con los distintos trabajadores y teniendo en cuenta la falta de documentación, parece evidente que no existieron procesos reales de selección de personal".
Los procesos de contratación en la etapa del PP, con Beatriz Simón al frente de Inndea, "estuvieron vinculados a situaciones diversas" como, por ejemplo, la realización de unas prácticas tras las que la persona se incorpora a la Fundación como empleada, la "sugerencia de alguna persona vinculada a los anteriores organismos", o la realización de un proyecto externo para luego incorporarse a trabajar como personal de plantilla.
Beatriz Simón, por su parte, denuncia que la auditoría está incompleta y no se ha dado la información sobre los contratos de la etapa del PP, al tiempo que advierte de que acudirá a la Fiscalía si se comprueba que se ha borrado información de los ordenadores, lo cual sería constitutivo de delito. Simón asegura en relación a los contratos en la anterior etapa que "puede haber algún contrato que no fuera del todo transparente, pero la normativa era distinta, ahora es más restrictiva".
La "purga" cuesta 400.000 euros
Simón, por otro lado, apunta que la purga llevada a cabo por Podemos en las Naves, donde se han despedido a 15 personas de la anterior etapa, dando entrada a otras nuevas a través de los procesos públicos de selección objeto de la auditoría, han supuesto un coste en indemnizaciones de 400.000 euros. "Habría que ver si esto es punible", destacó.
La auditoría de Waribo destaca la necesidad de plantear "procesos que resulten eficientes pero que mantengan su carácter garantista". Cuestiona igualmente que la fase de convocatoria y de méritos se hiciesen por separado, dando así la razón a algunos de los participantes de las pruebas que denunciaron que los puestos se hicieron a medida de determinados aspirantes. En este sentido, la auditoría destaca que "se ha sido eficaz en convocar a candidatos con determinada titulación académica, pero no en atraer a candidatos de otras especialidades académicas preferentes".
"Hay que determinar que, realmente, existe necesidad de cobertura del puesto que justifique el proceso de selección", recalca el auditor. Esta decisión, apunta, "ha de hacerse tomando en cuenta variables relevantes, entre ellas, saber si la cobertura se ajusta a la estrategia de la organización o no, si hay recursos para el puesto e, incluso, aspectos de gestión como la posibilidad de sustitución".
