La Calle Palleter quedará abierta en los próximos días, probablemente hoy, después de ejecutarse un PAI que ha acabado con la infravivienda que interrumpía el trazado y ha urbanizado más de 5.000 metros cuadrados situados entre las calles Palleter, Tarazona y Literato Gabriel Miró. Se resuelve así uno de los principales tapones urbanos de la ciudad y uno de los que más quejas vecinales ha generado en las últimas dos décadas.
La historia de este PAI comenzó en el año 2001, cuando se adjudicó en acuerdo plenario, y se consolidó en 2005 cuando se dio la condición de agente urbanizador a Promotora de Urbanizaciones Palleter SL. No obstante, distintos recursos y sentencias frenaron los trabajos e incluso después de aprobarse el proyecto en el año 2013 numerosos problemas con empresas de servicios lo han demorado hasta el año pasado, cuando finalmente empezaron las obras.
El PAI, enmarcado entre las calles Palleter, Gabriel Miró y Tarazona, consiste básicamente en derribar casas antiguas con una superficie de 5.000 metros cuadrados, abrir y prolongar la calle Palleter y construir 110 viviendas. Sólo la urbanización de este espacio tenía un presupuesto de 1,6 millones de euros y la edificabilidad total se ha fijado en 12.775 metros cuadrados.
En el ámbito de la intervención solo han quedado en pie un par de fincas recayentes a la calle Literato Gabriel Miró.
A día de hoy esos trabajos de urbanización están en su fase final y ayer mismo se estaba asfaltando la prolongación de la calle Palleter para abrirla a la circulación esta misma semana. No se descartaba, incluso, abrirla a lo largo del día de hoy, poniendo fin así a un tapón urbano del que los vecinos llevan quejándose 15 años.
