En días de debate sobre el papel de la mujer en fiestas como las Fallas, la de Sant Antoni ha registrado este año una novedad: por primera vez desde que echó a andar hace 65 años, la hermandad cuenta con una mujer en su junta directiva. Se trata de la joven Lara Martínez Albors, de veinte años y biznieta de unos de los famosos diecisiete fundadores de la fiesta y nieta del actual presidente, Miguel Albors. «Creo que es un paso muy importante. Y, además, se ha hecho con mucha naturalidad y aceptación: para formar parte de la directiva necesitas que te avalen dos personas y aquí fue por aclamación. Siempre he participado en esta fiesta y tenía claro que, en cuanto tuviera la mayoría de edad, lo intentaría». Una de esas situaciones poco entendibles: la falta de presencia femenina cuando, precisamente, la mujer es parte activa en el festejo, tanto como dueñas de animales domésticos como participando a lomos de diferentes cabalgaduras. «Es una fiesta muy bonita por el significado que tiene y es para venir a disfrutarla. Cualquiera que pase se llevará una agradable sensación». Recuerda la nueva directiva haber visto desfilar hasta tigres del circo». Cuando los había. Ella predica con el ejemplo con los nueve perros que tiene repartidos en diferentes casas. «Nunca debemos perder de vista que los que promovemos esta fiesta lo hacemos desde el amor que sentimos hacia los animales». Estudia anatomía patológica pero «durante mucho tiempo quise ser veterinaria. Y no lo descarto en el futuro».