Una de las reivindicaciones más firmes y activas de los vecinos de la ciudad de València es la de la construcción de un centro de salud en el barrio de Malilla. Tras varios años de peticiones y reclamaciones, ahora parece que, por fin, sus deseos podrían verse cumplidos tras la decisión aprobada ayer en la Junta de Gobierno Local. De este modo, y como informaban las portavoces Sandra Gómez (PSOE) y María Oliver (Valencia en Comú) ayer se aprobó la cesión por por parte del Ayuntamiento de València a la Conselleria de Sanitat Universal y Salut Pública, de una parcela de 2.430 metros cuadrados de superficie para que se construya en ella un nuevo centro de salud para el barrio de Malilla.

Según informaba Gómez, esta parcela se encuentra entre las calles Carrera de Malilla y Bernat Descoll. Gómez explicaba, igualmente, que el presupuesto de ejecución de esta parcela asciende a 2,3 millones de euros. Y argumentaba que el objetivo es que pueda licitarse cuanto antes. Es más, auguraba que los trabajos podrían empezar ya incluso en este 2018.

«Estamos satisfechos de poder poner esta parcela a disposición de la Generalitat y seguir contribuyendo así a una València más consolidada y con mejores servicios en todos los barrios», comentaba Sandra Gómez.

No obstante, para que esto se produzca es necesario, en primer lugar, que la Conselleria de Sanidad de el visto bueno a estos terrenos para dedicarlos al fin previsto. Algo que desde el Partido Popular no tienen nada claro.

«Cortina de humo» para Novo

Por su parte, el concejal del Grupo Popular, Alfonso Novo, calificó la aprobación de esta parcela como «una nueva tomadura de pelo del alcalde Joan Ribó a los vecinos de Malilla».

Novo argumentó que el acuerdo aprobado «es papel mojado», ya que «se trata de una mera declaración testimonial del tripartito sin ningún valor efectivo para la cesión, por la sencilla razón de que la Consellería no puede aceptar la parcela en las condiciones en las que se la pretende ceder el Ayuntamiento». Este acuerdo, ha proseguido el edil popular, «es una cortina de humo para calmar el manifiesto descontento de los vecinos de Malilla con la gestión que el tripartito ha hecho de esta actuación».

El concejal popular explica que la regularización jurídico patrimonial de la parcela, «no está realizada, y eso es una cuestión previa y necesaria para que la Consellería de Sanidad pueda aceptar la cesión».