La Acadèmia Valenciana de la Llengua, que se perfila para instalar su sede definitiva en la Roqueta, ya solicitó en 2002 la cesión del monasterio al Ayuntamiento de València.
La entonces alcaldesa Rita Barberá se mostró dispuesta a acceder a la petición de Ascensión Figueres, en ese momento presidenta de la AVL. «La posibilidad de ceder el uso de San Vicente de la Roqueta no se ve mal, al contrario, se ve bien, pero hay que hablar mucho sobre las condiciones», aclaraba Barberá tras haber analizado el tema el equipo de gobierno.
El grupo popular municipal defiende ahora, sin embargo, que el convento tenga «un uso abierto a todos los valencianos y acorde con su relevancia histórica». Para Alfonso Novo que la Roqueta albergue a la AVL, ubicada en San Miguel de los Reyes, restringiría su uso público «debido a que tendría una actividad académica muy concreta, y no el uso abierto para el barrio y todos los valencianos, que quedaría garantizado en el caso de ubicarse allí la biblioteca y la hemeroteca central junto con el centro de estudios al patrón».
El grupo municipal del PP defiende que la Roqueta tenga un uso «acorde con su relevancia histórica». Novo insistía ayer en que su opción continúa siendo la de que el convento se destine a la Biblioteca Central, y aprovechó para criticar la apuesta del equipo de gobierno municipal y en concreto al alcalde Joan Ribó por decantarse por la sede del Centre Excursionista para este fin.
«Ha pagado un millón al banco», remarcaba Novo, algo duramente criticado desde las filas populares, desde las que ayer hablaban de «falta de transparencia».
«Es un monumento de gran trascendencia en la historia de los valencianos, en el que la tradición sitúa los restos del patrón de la ciudad, San Vicente Mártir, y merece que el Ayuntamiento no tome una decisión unilateral antes de valorar, junto con los colectivos vecinales y con los vicentinos, qué usos va a tener», reiteraba Novo, quien es partidario de que allí se ubique un Centro de Recepción de Peregrinos «para recibir e informar a todos los peregrinos que realicen el Camino de San Vicente, una figura muy destacada en todo el orbe de la cristiandad y que merece tener en la ciudad una biblioteca y centro de estudios vicentinos, compartiendo y compatibilizando espacios abiertos para exposiciones», desgranaba.
El grupo municipal de Ciudadanos también ha reclamado la creación de una comisión que integre a técnicos de Urbanismo y Cultura, y en la que se consensúe el destino final de la Roqueta. El equipo de gobierno evitó ayer pronunciarse sobre si la Acadèmica Valenciana será finalmente la futura inquilina, y se insistía en que los candidatos son todos aquellos que contemplen fines culturales.
