El grupo de València en Comú en el Ayuntamiento de València, el tercer socio de gobierno, se mostró ayer partidario de revisar también el apartado del Reglamento del Pleno que fija dos años de compensación económica para aquellos concejales del equipo de Gobierno que al abandonar sus cargos se vean afectados por la ley de incompatibilidades. No tomarán, sin embargo, ninguna iniciativa al respecto, ya que fue una propuesta, dicen, de Alcaldía y el propio alcalde, Joan Ribó, ya ha dicho que su grupo presentará una alegación para modificar o aclarar ese punto.

Con esta posición distante, València en Comú se suma a la mostrada por el otro socio de Gobierno municipal, el Partido Socialista. En declaraciones a este periódico, la portavoz de esta última formación, Sandra Gómez, aseguró que el anuncio de Ribó de revisar ese punto del reglamento era «una buena idea». Es más, dijo que la propuesta había partido de Alcaldía y que esa alegación anunciada por el alcalde era en realidad una «autoenmienda». «La intención era buena, estaba pensada para casos muy claros, pero hay que ser rigurosos», dijo.

Ahora, València en Comú, se ha pronunciado brevemente sobre el asunto y ha coincidido en lo básico con la portavoz socialista. Según fuentes de esta formación, que es la marca municipal de Podemos, la idea de dar dos años de paga a los concejales del equipo de gobierno que se vieran afectados por la ley de incompatibilidades partió de Alcaldía y «desde el primer momento» su grupo ya dijo que sólo se aplicara a «casos excepcionales y si estaban bien regulados».

Para la formación morada, se trata, por tanto, de una responsabilidad directa de Alcaldía y no tomarán ninguna medida al respecto en forma de alegación, ya que el propio alcalde, Joan Ribó, «ha asumido esa responsabilidad» y ha anunciado que su grupo, Compromís, presentará una alegación para revisar esa parte del reglamento del pleno. «Nosotros estamos de acuerdo en que se reforme ese punto y simplemente estaremos atentos a la revisión que se haga ahora», dijeron las fuentes.

En la actualidad, el Reglamento del Pleno se encuentra en fase de información pública y alegaciones después de ser aprobado inicialmente en el hemiciclo con el apoyo de los tres grupos del equipo de Gobierno y la abstención del PP y Ciudadanos.

La oposición también alegará

Las dos formaciones de la oposición ya han anunciado también que presentarán alegaciones en este plazo de información pública para eliminar, entre otros, ese punto que hace referencia a las compensaciones económicas tras el abandono del cargo.

El portavoz del Grupo Popular, Eusebio Monzó, aseguró que esta decisión tenía difícil encaje jurídico, era poco ética y además iba en contra de lo que Compromís había defendido años atrás cuando el PP estaba gobernando en las administraciones valencianas.

Por su lado, Fernando Giner, portavoz de Ciudadanos, se sumó a estas tesis y también a la creencia de que esta medida es un «blindaje» para un equipo de Gobierno que «parece estar preparando su salida del poder» en las próximas elecciones municipales.

Aún así, Giner anunció otras alegaciones que harán referencia a la falta de medidas de control para el alcalde y para el conjunto del equipo de Gobierno, en consonancia con lo que habían presentado en sus programas electorales y en los acuerdos de la Nau que hicieron posible el tripartito.