Entre el color rojo que abarrota la plaza del ayuntamiento, los valencianos hacen cola durante la mañana para probar sabores orientales mientras sujetan una cartulina con su nombre escrito en caligrafía china. Es la celebración del nuevo año chino, el del Perro de Tierra, un festejo que ha empezado esta mañana a las 10 y que continuará hasta las ocho de la tarde.

Una docena de puestos abarrotan la plaza del ayuntamiento, en la que se encuentran tanto productos gastronómicos, como juegos infantiles de ajedrez chino o el Jián Zi, organizado por la asociación de estudiantes e investigadores de la embajada china. En el extremo de la plaza, el escenario acoge representaciones musicales, de artes de contacto como el wushu y hasta una masterclass de taichi. "El gran desconocido de los deportes", explica Carmen García, alumna desde hace tres años de la academia que realiza la representación. Así, los asistentes a la celebración confirman lo que ya sospechaban: "sabemos muy poco de la cultura china". De esta forma, los valencianos que pasean por la plaza celebran la iniciativa del Ayuntamiento y el Instituto Confucio de la Universitat de València (ICUV) como una manera de unir la cultura valenciana con la oriental y, a su vez, conocerla más allá del estereotipo, explican tanto Ernesto Navarro como Rosa López. Un puesto representa esta unión: el de la seda. Así lo explica José María Chiquillo, el máximo representante internacional de la Plataforma Ruta de la Seda para la Unesco, quien asegura que "nosotros" somos el reflejo del legado que dejó hace años los movimientos migratorios y comerciales de China. Y, que esta, es la mejor manera de rendirles homenaje.

Como colofón de la celebración, esta tarde a las seis y media de la tarde comenzará la Cabalgata del Año Nuevo Chino, en la que un dragón encabezará el desfile. Esta saldrá desde la calle de Pelai, 52, hasta llegar a la plaza del Ayuntamiento.