La dirección nacional del PP designará antes del verano a sus candidatos en Madrid y València, dos feudos clave ante las elecciones municipales de 2019 en los que gobierna la izquierda desde 2015, según informan fuentes populares. En ambas ciudades habrá renovación, dado que hace tres años Rita Barberá encabezó la lista valenciana y Esperanza Aguirre lo hizo por Madrid.

En el caso de València, las perspectivas se presentan complicadas por las presuntas irregularidades y casos de corrupción, desde la rama valenciana del caso Gürtel al caso Imelsa. De hecho, el PP municipal está implicado en la llamada «Operación Taula», que investiga si el grupo blanqueó 50.000 euros en la campaña de 2015.

El único concejal del PP en València no imputado en ese caso es Eusebio Monzó, que se presentó como independiente en la lista de Rita Barberá hace tres años. El presidente de la gestora del PP en la ciudad y diputado autonómico, Luis Santamaría, admitió hace unos días que le gustaría ser el candidato del PP a la alcaldía, unas declaraciones que no han sentado muy bien en la dirección del PPCV que dirige Isabel Bonig.

El cabeza de cartel para València, tercera ciudad de España, tendrá que contar con el aval de Génova, que no se pondrá a esta tarea hasta que no pase la Convención Nacional que el partido celebrará en Sevilla los días 6, 7 y 8 de abril. El exconsejero valenciano y actual portavoz en el Parlamento Europeo, Esteban González Pons, ya se ha descartado porque quiere seguir en Europa.