A punto de cumplirse 11 años de la explosión registrada en la subestación eléctrica de Patraix, ubicada a pocos metros de las viviendas, el traslado de la instalación de alta tensión sigue pendiente.

Ayer el alcalde de València, Joan Ribó, manifestó su intención de retomar los contactos con el Ministerio de Industria para alejar esta subestación y trasladarla junto al cementerio. Tras la presentación de la Feria del Libro, a preguntas de los periodistas, el alcalde manifestó su voluntad de que el Ministerio de Industria vuelva a tener sobre la mesa este proyecto que, según denunció el alcalde, «ha desaparecido de los Presupuestos Generales del Estado».

Ribó recordó los años de reivindicaciones ciudadanas, y destacó que el traslado estaba en la programación del Ministerio de Industria, «pero misteriosamente desapareció».

Por eso, aseguró hay que «seguir trabajando para volver a poner sobre la mesa el traslado de esta subestación, ya que su lugar normal es donde estaba programado, al lado del Cementerio». Hay que tener en cuenta que las competencias fundamentales en este asunto dependen del Ministerio de Industria, «que, en su momento, antes de este mandato, dio un paso atrás».

A pesar de las sentencias que anularon la licencia de la subestación, la instalación sigue activa.

Justo dentro de un mes, el próximo 15 de mayo, se cumplen 11 años de la explosión en la subestación de Patraix,tras la cual el pleno del ayuntamiento aprobó por unanimidad su cierre y su traslado. De hecho, las nuevas infraestructuras en la ciudad yan han sido soterradas.