Los arqueólogos empiezan a armar el puzzle de los restos de distintas épocas históricas (romana, islámica y cristiana) que están apareciendo en las obras de canalización de agua potable que ejecuta la Concejalía del Ciclo del Agua en un tramo de la marginal izquierda del Jardín del Turia comprendido entre Blanquerías y la plaza de Tetuán.

A pocos metros del lugar donde a principios de la semana pasada se localizó el paramento de la puerta de la Trinidad de la muralla cristiana, se han localizado nuevos restos de una puerta de la muralla islámica anterior a la del siglo XI que no había sido descrita, y de la que no existen dibujos o planos.

Esta puerta está formada por dos torres laterales adelantadas de distintas épocas, que en el siglo XI conformarían la puerta de Al-Warraq de la muralla islámica del siglo XI, construida durante un periodo floreciente de la Taifa de València y que contaría con siete puertas.

Se trataría de una puerta anterior a esta, perteneciente al recinto fortificado islámico previo al del siglo XI. Según explica la directora de las excavaciones, la arqueóloga Marisa Serrano, el estudio de la fábrica de los paramentos de los restos que han aflorado y la estratigrafía documentada «hace pensar que ambas torres son más antiguas que la citada puerta de Al-Warraq en cuya construcción fueron reutilizadas», detalla Serrano.

Abundante material

La zona donde se está excavando es un punto donde era previsible encontrar abundantes restos arqueológicos al tratarse de un espacio donde confluyeron las murallas de época islámica y cristiana, derribada en 1865, así como restos de época romana.

De hecho en las catas realizadas hace unas semanas en la marginal del río, frente al Temple, también se localizaron restos de los cimientos de la torre y la puerta de Al-Bufat, otro de los portales de la muralla árabe del siglo XI.

El puente de la Trinidad, donde han aparecido los restos de la puerta islámica no descrita hasta ahora, era uno de los principales accesos a la ciudad en época romana y visigoda. De hecho una de las escasas fuentes documentales que señalan la existencia de una muralla islámica anterior a la del siglo XI es el geógrafo Al-Razid que citó en sus crónicas las cuatro puertas de la ciudad del siglo X.

La torre situada al Este y realizada con pequeñas piedras tobas tiene una columna exterior, que también ha salido a la luz en las excavaciones y que en un principio se confundió con un «miliario», se construyó en época Emiral o Califal (siglos IX-X). La torre situada más al Oeste se construyó a partir de sillares romanos de una gran construcción tipo torre de época más antigua al siglo IX.

Esta puerta islámica del primer recinto fortificado árabe sobre la que se construyó la puerta de Al-Warraq de la muralla del siglo XI perduró hasta finales del siglo XIV-XV, cuando se construyó la muralla cristiana y se aprovecharon sus cimientos para la puerta de la Trinidad, que aparece en numerosos planos antiguos.

El concejal del Ciclo del Agua, Vicent Sarrià, ha visitado en varias ocasiones las obras para conocer de primera mano la evolución de los hallazgos arqueológicos.