La concejala de Agricultura, Horta y Pobles de València, Consol Castillo, el concejal de Comercio, Carlos Galiana, y el concejal de Cultura Festiva, Pere Fuset, se reunieron hace unos días con las alcaldesas y alcaldes de los pueblos de València para analizar los horarios de las fiestas patronales en cada uno de estos núcleos de población. En esta reunión, celebrada en la Sala de Comisiones Informativas del edificio municipal de la plaza de l'Ajuntament, se planteó la necesidad de equiparar los horarios de inicio y finalización de los actos festivos de las diferentes fiestas patronales con los que rigen para las Fallas.

La petición se produce cuando está a punto de presentarse el primer borrador de la nueva Ordenanza de Contaminación Acústica de València, en la que las alcaldesas y alcaldes de los pueblos quieren que se incluya la excepción que les equipararía a las Fallas para alargar las verbenas de las fiestas populares y patronales de cada pedanía.

La ordenanza actual fija dos condiciones para la celebración de las verbenas en fiestas patronales y Fallas. Por una parte habla de que no pueden superar el nivel máximo de ruido impuesto, 90 dBA medidos, a una distancia de cinco metros del foco sonoro. La segunda cuestión y en la que quieren poner énfasis los alcaldes pedáneos es la de los horarios. Así se establece por norma general que las verbenas podrán prolongarse hasta las 02:00 horas de la madrugada, mientras que en la festividad de San Juan se permite alargarlas hasta las 03:00 horas y durante las Fallas la permisividad es hasta las 04:00 horas.

La tradición en los pueblos de la ciudad sufrió un duro golpe cuando en 2008 el PP aprobó la nueva Ordenanza contra la contaminación acústica, en la que introdujo estas restricciones para las pedanías. Interrumpir las verbenas cuando son las dos de la madrugada en pueblo no es equiparable a la ciudad, no solo por el entorno, sino también porque en muchas de las pequeñas localidades los numerosos actos agrupados en un solo día obliga a que se alarguen los horarios, por lo que muchas veces cuando empieza la música queda poco margen para la diversión. Lo normal, hace unos años, es que estas verbenas se prolongaran hasta las cuatro de la mañana o más.

En el pasado se han producido numerosas denuncias a comisiones de fiestas de los pueblos por excederse en los horarios permitidos. Las multas y los horarios tan restringido han hecho mella en algunos pueblos, donde se ha observado como las fiestas ya no son tan multitudinarias como antaño. Se pide al Govern de la Nau que atienda la singularidad de los pueblos.

Petición a Medio Ambiente

Así, en la reunión mantenida con los diferentes concejales se llegó al acuerdo de introducir esta excepción en la próxima ordenanza contra el ruido, por lo que se hará una petición a la titular de Medio Ambiente, Pilar Soriano, para introducir modificaciones en el borrador de la futura ordenanza.